En la recta final de la campaña, Cambiemos se muestra confiado de ganar tanto en el distrito como en la sección. Apuestan a la participación de nuevos electores y al traslado de votos desde la lista de 1País de Luis Acuña. Desde Unidad Ciudadana apuestan a capitalizar las contradicciones del macrismo. ¿Cómo impactará el comportamiento fluctuante de Zabaleta? Durante la visita de Cristina Kirchner, militantes silbaron al intendente.
En la recta final para las elecciones del 22 de octubre, desde Cambiemos se muestran confiados con respecto a la Primera Sección electoral. Confían que ganaran en los distritos de su conurbano, a excepción de lo que denominan “las 3M”, a saber: Malvinas Argentinas, Merlo y Moreno. Dentro de este territorio, habrá que prestarle atención a algunos distritos, por las características locales de la compulsa. Tigre y Escobar en el norte, Ituzaingó y Hurlingham, en el oeste.
En este último, la pelea es de un final abierto. En el orden local, el macrismo logró el 36,98% de los sufragios –40.692 votos- con una interna en la Lucas Delfino se impuso a Ramón Fernández. Unidad Ciudadana obtuvo un 34,72% –38.203 votos- con una lista que encabezó Martín Rodríguez Alberti, cuñado del jefe camporista Andrés Larroque.
El massismo, por su parte, llevó a la cabeza de su lista al ex intendente Luis Acuña, para quedar fuera de la discusión tras obtener un magro 14,12%. El randazzismo, donde reportó hasta días después de las PASO el jefe comunal Juan Zabaleta –quien no armó, extrañamente, la lista de concejales de Cumplir-, apenas se alzó con un 5,82%.
Al respecto caben hacer algunas acotaciones. Una de las razones de los 2.400 votos de diferencia entre Cambiemos y Unidad Ciudadana fue que Hurlingham fue de los pocos distritos en donde el macrismo fue a internas. Un indicador de ello fue que las listas locales obtuvieron, juntas, más votos que la de Esteban Bullich.
Lo otro a considerar es el comportamiento electoral errático que tuvo el intendente. Si bien acompañó al ex ministro de Transporte, lo cierto es que en el distrito desistió de armar la lista de concejales de Cumplir. ¿Por qué razón? Especulaba con lograr una lista de unidad en la que confluya el randazzismo y el cristinismo. Así, la nómina que finalmente encabezó Damián Del Castaño –tras la renuncia de Natacha Ghergo- tenía la finalidad de ser usada como instrumento de presión de Zabaleta, para lograr un acuerdo con Rodríguez Alberti.
Nada de esto sucedió, y el gran perdedor fue el intendente, quien debió recalcular luego de las PASO, retornando sobre sus pasos gracias a la asistencia del intendentismo peronista –lease Gustavo Menéndez y Leonardo Nardini-. Con el llamamiento de Zabaleta a votar a Unidad Ciudadana, este último espacio recibió un fuerte impulso de cara a octubre. Si bien no fue la alianza más votada, nominalmente el candidato camporista fue el candidato más votado: 35.888 votos contra los 29.951 de Delfino.
Faltando diez días para el veredicto popular, es crucial efectuar algunas preguntas para este distrito. ¿Qué espacio logrará crecer más? Los 10.741 que obtuvo la lista de Cambiemos que encabezó Ramón Fernández, ¿irán en su totalidad para Delfino? ¿Cuántos de los 6.403 sufragios de Cumplir optarán por la lista de Rodríguez Alberti y Zabaleta? Si hubiera un porcentaje mayor de participación, ¿a cuál de los dos espacios beneficiará?
Hoy, Cristina Kirchner visitó el distrito. Se mostró junto al intendente y al candidato. Hubo sensaciones encontradas. Si bien la ex presidenta agradeció a Zabaleta por la vuelta a su espacio, entre el público fueron notorios los chiflidos hacia este último. Quizás, como pase de factura por sus idas y venidas. ¿Tendrá esto un impacto negativo? Desde el cristinismo local aseguraron a este medio que buscan trabajar el voto útil, intentando convencer a los votantes de Cumplir y a los que votaron a la lista de Luis Acuña. También especulan con que la interna de Cambiemos no se haya saldado, y que haya votos de Fernández que opten por su lista en lugar de la de Delfino.
En el entorno de Delfino se muestran confiados. “No creemos que la elección va a ser voto a voto. Vamos a ganar bien”, dijeron a La Noticia Web. Las razones de ello, la suposición de que habrá dos mil electores más que, descuentan, volcarán en su mayoría su preferencia a Cambiemos. En segundo lugar, aseguran que el frente interno lo tienen ordenado. “La lista de Fernández acompaña”, aseguran. Por último, cuentan con la migración promedio del voto massista.
¿Qué proyección será acertada? Aunque desde el cambiemismo exhiban confianza y argumentos, no hay que descartar nada. Zabaleta se complicó pero no por ello está derrotado. Habrá que seguir con sumo interés el desarrollo de estos comicios.
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