El exfuncionario, además empresario e involucrado en el Caso García Belsunce y acusado por proteger a apropiadores de la dictadura -entre otros episodios en los que trascendió a la fama- suele venir a La Pampa a cazar. Esta vez, la justicia se posó sobre él, a partir de un acta de infracción que se le labró en la comisaría de Toay.

Romero Victorica siempre tuvo un alto perfil: es un admirador del modelo menemista, que se fue del Poder Judicial para evitar un jury. Entre otras cosas, era amigo del exministro de Economía de la dictadura, el fallecido Alfredo Martínez de Hoz, quien también tenía la costumbre de venir a cazar a La Pampa.

De acuerdo a lo que puso saber El Diario, Romero Victorica está bajo la lupa por una infracción a la ley 1194. Traía carne de ciervo en su vehículo, según quedó asentado en la documentación de la pesquisa.

Además, fue remitida al Juzgado Federal la información relacionada con la portación de armas. De acuerdo a lo que se pudo conocer, entre las numerosas armas que llevaba había dos que estaban sin la documentación correspondiente, y además cargadas, en condiciones de ser disparadas, lo que requiere otro permiso especial. Serían una Magnum 44 y una carabina 22. Se investiga, en esos casos, una infracción a la Ley 20.429.

Fuentes policiales confirmaron además que llevaba 3 o 4 fusiles grandes y un revólver. Aparentemente, Romero Victorica tiene la credencial de legítimo usuario de armas de guerra, aunque no la llevaba consigo. Ese permiso, de todos modos, no lo habilita a llevar las armas cargadas. En ese caso es requerido el permiso de portación.

Esta causa la investiga la Justicia Federal, porque siempre que la Policía interviene en este tipo de episodios y detecta la presencia de armas eleva las actuaciones a ese organismo. Pero aunque se le dará intervención al fiscal Juan José Baric, no se descarta que la jueza subrogante Iara Silvestre se declare incompetente, como es habitual cuando las causas se refieren a los incisos impares del artículo 189 bis del Código Penal. Por lo tanto la causa pasaría a la Justicia provincial.

Romero Victorica renunció como fiscal de la Cámara de Casación Penal en agosto de 2011, cuando iba a ser sometido a un jury de enjuiciamiento que podía terminar en la destitución. Llegó a esa instancia por la denuncia que hizo Victoria Montenegro, nieta recuperada: aseguró que el exfiscal colaboró con la defensa judicial de su apropiador un ex integrante de Inteligencia del Ejército .

Romero Victorica negó la veracidad de la denuncia y la consideró parte de una campaña de desprestigio. Montenegro denunció en el Tribunal Oral Federal 6 donde se enjuiciaba a los dictadores Jorge Videla y Reynaldo Bignone entre otros, por el plan sistemático de la Dictadura para el robo de bebés, que Romero Victorica - que era fiscal de la Casación desde 1992- le adelantaba lo que iban a hacer los investigadores judiciales al coronel Herman Tetzlaff quien estaba imputado como apropiador de una hija de desaparecidos.

Victoria recuperó su identidad en 2000. Es hija de Hilda Torres y Roque Montenegro. Su apropiador, Tetzlaff (fallecido), estaba además de por la apropiación de una bebé, bajo sospecha por haber integrado grupos de tareas del centro clandestino El Vesubio y en Campo de Mayo. Victoria dijo que Romero Victorica “llamaba a casa y le daba información” sobre el expediente en su contra.

El entonces legislador Marcelo Parrilli (MST-Nueva Izquierda) lo señaló como “partícipe necesario de los secuestros, torturas y desapariciones” de la dictadura.

Romero Victorica tiene 70 años. Antes de su renuncia, se jactó: “El día del aniversario del fallecimiento de Evita (26 de julio), cumplí las bodas de oro en la Justicia". Remarcó que tenía "la jubilación otorgada hace seis años" y que renunciaba porque se “había cumplido un ciclo”.

En el Caso García Belsunce tuvo importante participación: asistió al fallecimiento de María Marta y le aseguró al fiscal de la causa, Diego Molina Pico, que había sido un accidente.

"Martínez de Hoz me conoce desde chico, desde mis años mozos, porque él fue junto a mi padre, cofundador de la Democracia Cristiana en la década del 50", dijo Romero Victorica en una entrevista con la revista Noticias en 1993. Sobre otro de sus amigos cercanos, el ex montonero Rodolfo Galimberti, señaló cuando fue invitado a la fastuosa boda que organizó en Punta del Este: "Que me haya invitado a su casamiento es sólo una anécdota. Puedo ir al casamiento de Galimberti, del almirante Rojas o de quien sea".

En los '90, Romero Victorica se había postulado para ser juez del Tribunal de Casación Penal. Menem, cercano al fiscal, envió un pliego al Senado para postularlo pero la Cámara Alta rechazó el pedido. "Los resentidos históricos, la izquierda más virulenta me comenzó a atacar. Es que como consecuencia de mi accionar jurídico contra la subversión ellos ven en mí a un reaccionario", dijo ante la negativa, en referencia a su participación en la fiscalía de la Cámara Federal de San Martín que investigó a ex militantes montoneros.