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FERNANDO CIBEIRA

Estaba pautado que acompañara a la vicepresidenta Victoria Villarruel como ministro del Interior, pero finalmente Guillermo Francos participó del encuentro con senadores como flamante jefe de Gabinete y nueva figura rutilante del oficialismo. La idea era terminar de pulir diferencias de criterios para asegurar que este miércoles estén las firmas para sacar dictamen de la ley Bases, el objetivo más ansiado por el Ejecutivo. "Creo que hemos llegado a un consenso", arriesgó Francos a la salida. Sin embargo, no fue la impresión que les quedó a los legisladores, que entendieron que seguía todo más o menos igual. Para más, luego, en la Cámara de Diputados, hubo dictamen de proyectos para restituir el Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid), eliminado por el gobierno de Javier Milei en enero. En su debut, Francos pudo comprobar que no la tendrá fácil.

Francos viene batallando por conseguir acuerdos desde que Milei se convirtió en presidente electo. La diferencia es que antes el Presidente lo desautorizaba en público, ahora, a partir de su ascenso a lo más alto del gabinete, hay que pensar que tiene vía libre para sumar voluntades. El Gobierno está decidido a sacar la ley Bases como sea. A seis meses de iniciado, tiene que conseguir que el Congreso le apruebe algo, para mostrar a quienes observan en el exterior que tiene algún respaldo político concreto, más allá de los trolls en las redes. Este proyecto Bases es un tercio del Omnibus original presentado en enero y luego tuvo varias modificaciones. De hecho, circuló un último borrador el viernes, con el que varios opositores dialoguistas siguen manteniendo puntos de disidencia. 

Los números son muy finitos. El bloque de Unión por la Patria tiene 33 senadores firmes en el rechazo, por lo que sólo le alcanza con sumar otros cuatro. Los dos santacruceños, la senadora de Río Negro, el radical Martín Lousteau y su aliada larretista Guadalupe Tagliaferri, junto los peronistas disidentes Edgardo Kueider y Camau Espínola mostraron muchos reparos al proyecto, Hay que agregar ahora a ese lote a los senadores misioneros, enojados por la indiferencia que muestra el Ejecutivo al conflicto social que mantiene en vilo a la provincia. Son demasiados a convencer y el paso de Francos no parece haber aportado mayores novedades.

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"Llevamos seis meses de gobierno y no nos dieron una ley. Somos un bloque de siete senadores contra 72 somos. Y somos un bloque de 38 o 40 diputados sobre más de 200. Somos muy minoría y no tenemos ningún gobernador. Trabajamos en equilibrio con todos para sacar una ley importante”, se quejó anoche Francos, en una de las muchas entrevistas que ofreció a lo largo de su primera jornada en el nuevo cargo. En ese rubro será la contracara de su antecesor Nicolás Posse, que se fue del gobierno sin haber hablado nunca con la prensa. Todo un récord. En cuanto a la ley, no todos los senadores en dudas forman parte del plenario de comisiones de este miércoles. Entre quienes sí lo integran figuran Lousteau y el santacruceño José María Carambia, cuyas firmas serán decisivas para que el oficialismo pueda conseguir dictamen.

Pero, aún si lo consiguiera, la Rosada tampoco tiene certezas de alcanzar los 37 votos en el recinto. El régimen RIGI -aún con las modificaciones que se le aplicaron-, las empresas a privatizar, el blanqueo, los cambios a Bienes Personales y ni hablar de la reimplantación del impuesto a las Ganancias, son todas cuestiones que siguen generando resistencias entre muchos legisladores. Algunos de ellos -por ejemplo, el radical fueguino Pablo Blanco-, adelantó que, más allá de estas diferencias, están dispuestos a dar su voto afirmativo en general, para no aparecer poniendo obstáculos a la gestión presidencial. Este miércoles a las 15 arranca el plenario de las comisiones de Legislación, Presupuesto y Asuntos Constitucionales, y a las 17 las de Presupuesto y Hacienda por la reforma fiscal. 

Pero no sólo fue opaco el debut de Francos en el Senado. Al mismo tiempo, se debatía en plenario de comisiones en Diputados la continuidad del Fonid, el fondo nacional para los docentes que Milei dio de baja al inicio de su gestión y que tantos problemas viene generando en las cuentas provinciales. Misiones es una muestra de ello. Los bloques de La Libertad Avanza y del PRO buscaron postergar la discusión, pero no lo consiguieron por estar en minoría. En total, hubo cinco dictámenes: el de mayoría fue el de Unión por la Patria, con 34 firmas. Plantea que el Fonid retome su vigencia desde el 1 de enero pasado y que se actualice de acuerdo a como se determine en la paritaria nacional docente. “Dictaminamos a favor de la continuidad del Fonid incluyendo conectividad y material didáctico a partir del 1 de enero 2024. Es un paso indispensable para otros debates pendientes que daremos”, explicó Blanca Osuna, vicepresidenta de la comisión de Educación por el bloque de UP.

Milei prometió vetar toda ley que represente un incremento del gasto público. Pero hay un sector de la oposición -Unión por la Patria, el FIT, junto a un sector del bloque de la UCR y de Hacemos- viene impulsando proyectos para mejorar la movilidad jubilatoria, la actualización del presupuesto universitario y, ahora, la restitución del Fondo de Incentivo Docente, todas iniciativas que se ocupan de áreas sensibles. Mientras se discutía en el Congreso, el Frente Sindical de Universidades Nacionales convocó a un paro de 48 horas para el 4 y 5 de junio ante la falta de respuesta del Gobierno para discutir una recomposición salarial de docentes y no docentes.