En el marco de la celebración de sus 20 años de operación en Colombia, Coca-Cola FEMSA, embotelladora líder de bebidas, anunció el nombramiento de Carlos Alfredo González, como nuevo presidente de la compañía en el país. Hablamos en exclusiva con él para conocer el compromiso de la Compañía con generar valor económico, social y ambiental en el país.
La historia de Carlos Alfredo González en Coca-Cola FEMSA empezó en 1996, desde entonces ha ocupado cargos cada vez con más responsabilidad en términos de planeación, mercadeo y operaciones comerciales en México, Filipinas, Costa Rica, Nicaragua y Panamá. Ahora, 26 años después, liderará la operación logística y comercial, así como las iniciativas en economía circular, eficiencia energética, movilidad sostenible, gestión del agua, diversidad e inclusión y fomento económico de la Compañía en Colombia.
“Colombia es uno de los países más importantes para nuestra Compañía. Durante los últimos 20 años hemos construido un mercado estable, que ha demostrado un crecimiento de doble dígito, posicionándonos como la segunda operación más fuerte de la región, después de Brasil. Este crecimiento no lo hemos logrado solos, nuestros colaboradores/as, aliados estratégicos, recicladores/as de oficio, clientes, tenderos/as y consumidores/as han sido parte de la construcción de nuestra sólida operación”.
Su compromiso con la sostenibilidad
El presidente González reveló que la Compañía se ha trazado un propósito muy claro en temas de eficiencia energética, movilidad sostenible, gestión de agua y economía circular: ser el ecosistema comercial preferido y más sostenible del mundo. Para lograrlo ubicaron a la sostenibilidad en el corazón de su operación. Han enfocado sus esfuerzos para ser cada vez más eficientes con estrategias como envases 100 % reciclables, reducción del uso de agua por litro de bebida producida y plantas que operan con energía renovable.
“Otro punto que es crucial para nuestra Compañía es la distribución. Por eso nos hemos concentrado en la reducción de la huella de CO2 con acciones como vehículos repartidores 100 % eléctricos y con Gas Natural Vehicular. Y, por último, el momento en el que los productos llegan a las manos de los consumidores/as; para nosotros las botellas vacías son un activo muy valioso, pues cuando las reciclamos y las convertimos en nuevas botellas, cerramos el ciclo de la economía circular. Así estamos trabajando desde todas partes de la cadena para ser los más sostenibles”.
Las tres metas con la economía circular
Las industrias de consumo masivo, como Coca-Cola FEMSA, son cada vez más conscientes de su papel diferenciador en la reducción, reúso y reciclaje de materias primas aprovechables y de productos residuales de su operación. En el caso de la Compañía sobresalen el plástico y el vidrio, por lo que han implementado programas que garantizan el cierre del ciclo de estos materiales.
El presidente cuenta que se han enfocado en cada una de las partes de su cadena de valor, junto con sus aliados estratégicos, con el fin de aumentar la capacidad de reciclaje en el país. Bajo esa premisa, y de la mano de la Compañía Coca-Cola, desarrollaron la estrategia “Un Mundo sin Residuos”, con la que buscan, para 2030, cumplir tres grandes metas.
“Primero, queremos recolectar y reciclar el equivalente al 100 % de los envases que ponemos en el mercado; segundo, que por lo menos el 50 % de nuestros productos sean fabricados con material reciclado; y finalmente, impulsar el uso de envases retornables a nivel mundial para que al menos el 25 % de todas las bebidas de nuestro portafolio sean botellas de vidrio o plástico retornables”.
Para alcanzar estos objetivos, crearon ‘Reciclave’, un programa que, desde el 2021, no solo ha incrementado significativamente la tasa de recolección y reciclaje de material aprovechable, sino que ha dignificado la labor de los recicladores/as de oficio. Actualmente la iniciativa opera en Bogotá y en ciudades de Santander, Norte de Santander, Córdoba, San Andrés y Providencia, entre otras; y muy pronto el programa llegará a Tolima y Cartagena.
Un punto por destacar de esta iniciativa es que, bajo la idea de dignificar su labor, la Compañía ha creado espacios de capacitación y, a la fecha, ha entregado más de 100 motocargueros y otros elementos de carga, transporte y herramientas que hacen su labor más eficiente como máquinas compactadoras, dotación y elementos de protección. Este trabajo conjunto ya ha dado frutos como la recolección de 140 millones de botellas para darles una nueva vida.
“Este programa nos ha dado la oportunidad de conocer historias inspiradoras como la de Lizeth y Relis Arigan Forbes (Zambo), dos hermanos que lideran procesos comunitarios para garantizar la gestión de residuos en San Andrés y Providencia con la adaptación del modelo de Reciclave. Como ellos, hay miles de recicladores/as de oficio que, a través de nuestras iniciativas, están contribuyendo a la economía circular y están mejorando su calidad de vida, la de sus familias y comunidades”.
La sostenibilidad con impacto social
En palabras del presidente González, la promoción de un ambiente laboral seguro para la diversidad no debe ser negociable, y por eso tienen políticas de Diversidad, Equidad e Inclusión muy interesantes. Por ejemplo, el programa ‘Cinta Violeta’, una iniciativa que empodera a las colaboradoras para que accedan a roles que históricamente han ocupado hombres.
Con esto buscan fomentar el crecimiento profesional y de sus proyectos de vida. No en vano, han acompañado el proceso de 73 mujeres de las plantas de Tocancipá, Bucaramanga y centros de distribución que hoy son ‘Cinta Violeta’.
“Quiero resaltar el trabajo en la promoción de desarrollo gerencial, empoderamiento y liderazgo femenino en la compañía, pues el 43 % de nuestras posiciones directivas son ocupadas por mujeres, quienes lideran áreas clave para nosotros como Administración y Finanzas, Comercial, y Legal y Asuntos Corporativos”.
Pero sus esfuerzos no han sido solo hacia adentro de la organización, también se han interesado por el bienestar de las comunidades con las que tienen contacto y que esperan los sientan como un aliado. En parte porque, como Compañía, entienden que el empoderamiento económico es un vehículo que garantiza ese cierre de brechas y de desigualdad en países como Colombia.
Para lograrlo pusieron en marcha programas de capacitación técnica en finanzas, digitalización y mercadeo, esto para potenciar el desarrollo de sus clientes de pequeños y medianos negocios, lo que los convierte en agentes de cambio para sus comunidades.
Algunos ejemplos que da el presidente González son el programa de formación para 75 tenderas que desarrollaron con el Instituto de Ciencia Política Hernán Echavarría Olózaga – ICP en Cali y Pereira. Y las iniciativas ‘Ruta Tenderos’ y ‘Emprendamos Junt@s’, que desarrollan con distintos aliados, con las que han impulsado el crecimiento de más de 10.000 tenderos y tenderas en Colombia.
Una industria en evolución
De cara al futuro, el presidente González afirmó que siempre están adaptándose y cambiando para ofrecer la mejor experiencia a todos sus stakeholders. Una de esas líneas es la transformación digital, que los ha llevado a posicionarse como Compañía líder en canales de venta, con plataformas innovadoras omnicanal, con una comunicación sin activa con sus clientes, y pensando en sus necesidades del presente y del futuro. Hoy más del 70 % de sus clientes hacen sus compras en el canal digital, lo que se traduce en el crecimiento de pequeños y medianos negocios.
“Este 2023 estará enmarcado en la celebración de los 20 años de la llegada de Coca-Cola FEMSA a Colombia. Me siento muy honrado de ser parte de esta operación sostenible que ha sido parte del crecimiento económico del país durante este tiempo”, finaliza Carlos Alfredo González, nuevo presidente de Coca-Cola FEMSA Colombia.
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