En su quinta declaración indagatoria ante la jueza María Romilda Servini, Ibar Esteban Pérez Corradi volvió a mencionar al ex jefe de Gabinete Aníbal Fernández.

Luego de haber dicho hace dos semanas que el ex funcionario era "La Morsa" que figuraba en el expediente de la causa de la efedrina, ahora Pérez Corradi lo vinculó con la red que le daba protección para poder importar ilegalmente al país ese precursor químico con el que se elaboran drogas sintéticas.

En ese sentido, el acusado de ser el autor intelectual del triple crimen de General Rodríguez dijo que llegó a pagarles 100 mil pesos mensuales a oficiales de la División Delitos contra la Salud de la Policía Federal para tener protección y que Fernández tenía conocimiento sobre esos pagos.

Pérez Corradi volvió a poner a Fernández en el centro de la escena, pero nuevamente a partir de dichos de terceros, ya que aclaró que nunca vio al ex funcionario ni habló con él.

En su relato de cómo era la operatoria con la efedrina, Corradi sostuvo que para 2007 se sentía "acorralado" por otros traficantes y por las propias fuerzas de seguridad.

Así, recurrió a dos oficiales de la División de Delitos contra la Salud, uno de apellido Mondragón y otro apodado "El gaucho". A esos policías, Corradi dijo que comenzó a pagarles cinco mil pesos por mes y que el canon por la protección llegó a alcanzar la suma de 100 mil pesos mensuales.

En ese esquema de protección, Pérez Corradi también nombró al ex intendente de Quilmes Sergio Villordo, con quien dijo que se reunió aunque no dio precisiones.

Pérez Corradi señaló que tanto los policías como Villordo invocaban en sus charlas a Aníbal Fernández.

Fernández fue ministro del Interior del 2003 a 2007 y en diciembre de ese año asumió como titular de Justicia y Seguridad. En ambos ministerios tuvo a su cargo las fuerzas de seguridad, entre ellas la Policía Federal.

Las fuentes consultadas señalaron que todos los dichos de Corradi deben ser corroborados y que en muchos casos la información que aporta es porque la conoce a través de otras personas, no directamente por él.

Forza, junto con Damián Ferrón y Leopoldo Bina, son las víctimas del triple crimen de General Rodríguez, del que Corradi está acusado de ser el autor intelectual porque le disputaban el negocio de la efedrina.

También había dicho la semana pasada que Fernández tenía un cierto grado de control sobre los movimientos de la efedrina.

Prófugo desde 2012, Pérez Corradi fue detenido hace un mes en Fóz de Iguazú, en Brasil, y extraditado al país desde Paraguay. Se encuentra detenido en el Edificio Centinela de Gendarmería Nacional bajo el régimen de protección de imputados del Ministerio de Justicia de la Nación.

La indagatoria de Pérez Corradi continuará –todavía la jueza Servini de Cubría y el fiscal Juan Pedro Zoni no pudieron hacerle preguntas– presumiblemente el miércoles ya que mañana no está previsto que declare.

Reconoció tráfico a Estados Unidos

En su relato, Pérez Corradi reconoce que traficó efedrina de manera ilegal al país. Pero hoy también lo hizo respecto de haber enviado a los Estados Unidos 80 pastillas de oxicodona, un analgésico derivado del opio, a través del correo.

Por ese caso tiene un pedido de extradición de ese país que ya fue aprobado por la Justicia argentina en 2009.

En su relato de cómo era el negocio de la efedrina, Pérez Corradi contó sus negocios en el extranjero. En ese marco, sostuvo que también envió oxicodona a Estados Unidos