La titular del único ministerio dedicado a las políticas de género en todo el país dijo que la denuncia contra Alberto Fernández debe juzgarse "con perspectiva de género" y apunta contra las políticas libertarias que recortan el presupuesto para las áreas de cuidado y prevención.
Por Luca Fernández.
La denuncia por violencia de género de Fabiola Yáñez contra el expresidente Alberto Fernández movió los cimientos de la actualidad política. La provincia de Buenos Aires tiene el único Ministerio de Mujeres y Diversidad de todo el país, y Estela Díaz, su titular, afirma a BuenosAires/12: "En esta situación, como en todas las otras, queremos debido proceso, celeridad, perspectiva de género y garantías a la persona denunciante de que va a ser respetada y que se van a cumplir sus derechos".
La ministra de las Mujeres y Diversidad advierte que junto con sus compañeras están "cansadas del carancheo con las políticas de género y con el feminismo". Su expresión se debe a que en las últimas horas, el vocero presidencial, Manuel Adorni, hizo alusión al hecho y escribió en su cuenta de X que "la Línea 144 está abierta las 24 horas para asistir a todas aquellas personas que sufren violencia por motivos de género".
"Ellos mismos dijeron que echaron al 85 por ciento de las trabajadoras que estaban en el ex ministerio de Mujeres, Género y Diversidad, y un porcentaje importante de ellas eran trabajadoras de la línea 144, que quedó funcionando pero con un mínimo de plantel", advierte Díaz, que afirma que "no es cierto que están garantizando una atención como la que había antes".
Por eso motivo, semanas atrás, la Provincia anunció el Plan de Fortalecimiento de la Línea 144 bonaerense, que es la primera respuesta para las mujeres que sufren situaciones de violencia. El día de su presentación, Díaz dijo que por los despidos la Línea 144 "hoy tiene serios problemas de funcionamiento", y explicó que la inversión pública del Estado bonaerense supone preparar personal especializado, porque en la Línea 144 "no atienden ni bots ni máquinas, sino profesionales de equipos interdisciplinarios que se preparan, que tienen dispositivos de seguimiento de los casos, y protocolos para la atención, las derivaciones y en el asesoramiento".
En el primer cuatrimestre de 2023 la línea 144 nacional atendió más de 50 mil mujeres y diversidades bonaerenses, porque el segundo cordón del conurbano, por un tema de antenas, rebotaba las llamadas y las derivaba en la línea dependiente de Nación. Por ese motivo, muchas mujeres que son víctimas de situaciones de violencia "hacen fila de espera y terminan desistiendo porque pasan media hora sin ser atendidas", según la ministra.
El reclamo a la Nación
A la sazón de ese anuncio, el Ministerio de Mujeres y Diversidad de la Provincia de Buenos Aires elevó, al Estado Nacional, un pedido de información sobre la situación de las políticas y acciones para la protección, prevención y asistencia de las violencias contra las mujeres por razones de género. Sobre la Línea 144, la cartera provincial pidió saber qué área es actualmente la responsable de la línea, cuántas y cuántos trabajadores desempeñan sus funciones actualmente de manera exclusiva en ese sector, en qué turnos de trabajo y con qué roles. Solicitaron conocer cuántas y cuántos trabajadores sordos e hipoacúsicos se encuentran contratados actualmente para la atención del sistema de videollamadas, destinado a personas con la misma condición y que atraviesan situación de violencia por razones de género.
Además, pidieron el detalle de cuántas comunicaciones de ésa índole fueron recibidas por la línea, según provincia y municipio de residencia del o la denunciante. A su vez, la Provincia quiere acceder al número de intervenciones por violencias por razones de género realizadas desde la Línea 144.
Pasó más de un mes y el Ministerio de Justicia de Nación, encabezado por Mariano Cúneo Libarona, nunca respondió. Adorni y Libarona prometieron públicamente que echarían al 15 por ciento del personal restante. El vocero, en X, escribió este miércoles que el Gobierno nacional "decidió vender" el edificio donde funcionaba el Ministerio de las Mujeres, porque "tiene un valor aproximado de 12,5 millones de dólares y se encuentra en virtual estado de abandono".
Las autoridades bonaerenses aún aguardan una respuesta sobre, por lo menos, algunos de los puntos consultados. Además de la Línea 144, éstos estaban relacionados a la estructura administrativa, las misiones y las funciones de la cartera nacional eliminada, las políticas de asistencia para personas en situación de violencia por razones de género, los Centros Territoriales Integrales de Políticas de Género y Diversidad, y la Red de Asistencia Integral.
También pidieron información concreta sobre las políticas de fortalecimiento del acceso a derechos y al sistema de justicia de las personas en situación de violencia por motivos de género, sobre el cuerpo de abogadas y abogados para víctimas, y sobre las políticas de protección integral de las mujeres y personas LGBTI+. Nación, además, debe explicar que pasó con los programas de prevención, con las políticas de abordaje y reparación de femicidios, travesticidios y transfemicidios, con la reparación económica para niñas, niños y adolescentes y con las políticas de articulación.
El Ministerio de las Mujeres y Diversidades bonaerense todavía no sabe que pasó con las políticas para la igualdad, ni qué acciones se desarrollaron para la implementación de los programas Menstruar, Registradas, Igualar para la igualdad de géneros en el trabajo, el empleo y la producción y el programa Constructoras. El desconocimiento también encuadra al destino de las políticas focalizadas para la diversidad, y de los programas de formación.
Creerle a las mujeres
En torno a la denuncia contra el expresidente, la ministra subraya a este diario: "Cuando decimos que le creemos a las mujeres que denuncian, no es porque eliminamos el principio de inocencia que tiene cualquier persona denunciada, pero sí queremos que se juzgue con perspectiva de género, y más aún cuando se denuncian a personas que tienen poder".
El abogado Juan Pablo Fioribello desistió de representar a Fernández porque aseguró que Yáñez le dijo: "Lo denuncié porque me pegó, varias veces, me golpeó, me pateó y me pegó en la cara". El expresidente sostuvo que "es falso y jamás ocurrió lo que ahora me imputa". El fiscal Carlos Rívolo, cargo de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N° 6, deberá tomarle declaración a Yáñez y ordenar nuevas medidas de prueba.
"Ninguna denuncia, por más resonante y del carácter que sea, nos va a mover de nuestra convicción, que es la de defender a las personas que denuncian, dándole garantías y acompañamiento, porque sabemos que el Poder Judicial es patriarcal", apunta Díaz, que milita desde hace cuarenta años en políticas de género. "Nuestra perspectiva es seguir en consecuencia, se denuncie a quien se denuncie, y por eso queremos políticas, recursos y programas para atender a las víctimas", agrega a BuenosAires/12.
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