Con este revés judicial, el galeno Julio Tamburelli y su expareja, Silvana Tornati continuarán detenidos en una alcaidía de la capital provincial.

La investigación la encabeza el titular de la UFI nº 8 de Delitos Complejos, Jorge Paolini, quien afirmó que los detenidos son investigados por hechos durante la gestión que encabezó el sciolista Antonio La Scaleia como presidente del IOMA.

El caso es uno de los 65 sospechosos de defraudación y justamente uno de ellos es el de la afiliada Marta Sánchez, en el cual IOMA le pagó a la empresa Clinicasa, con sede en Tandil, un monto total de 58.272 pesos, pese que la afiliada jamás recibió el servicio de internación domiciliaria.

En la causa se reunió prueba para acreditar que el 30 de noviembre del 2012, el médico imputado inició en la delegación Tandil del IOMA, un trámite de internación para la afiliada Sánchez, estampó su firma y falsificó la del marido de la supuesta paciente, por la que se autorizaba a la empresa “Clinicasa” a hacer la prestación de internación domiciliaria”.

De acuerdo al fiscal, ambos falsificaban la firma de la afiliada Marta Sánchez en documentos por falsos servicios de internación domiciliaria, en los que supuestamente era asistida por un kinesiólogo y enfermeras.

Las pericias determinaron que ni la afiliada, ni los profesionales rubricaron sus firmas en los expedientes que el médico presentaba en IOMA y cobraba importantes sumas.

Según la denuncia, Sánchez figuraba en la base de datos de la obra social con las siguientes prestaciones: médico (cuatro veces por semana), enfermería, cuidador domiciliario de 16 horas diarias, kinesioterapia (doce sesiones por mes), fisioterapia, kinesioterapia respiratoria (doce sesiones por mes), cama colchón anti escara con nebulización y aspiraciones, módulo II a partir del 1º de noviembre del 2012 con un valor mensual de 9.712 pesos por seis meses y renovación.

 “A la afiliada le falsificaron la firma como también las prestaciones del servicio de kinesiología y enfermería. Le tomamos la declaración testimonial al kinesiólogo, a la enfermera. Se estudiaron las escrituras, se peritaron las firmas y se determinó que las rúbricas que presentó la acusada no coincidían con las de los empleados, que dijeron que nunca habían atendido a la afiliada. Con esa documentación falsa se presentaban en el IOMA y cobraban”, remarcó Paolini.

Detectives de la DDI de Azul, a primera hora de la mañana del miércoles 12 de octubre detuvieron al médico Tamburelli, en su domicilio de Bolívar al 500, imputado en el marco de la megacausa por defraudación al IOMA.

En la noche de esa jornada se llevó adelante la aprehensión de la expareja del galeno, identificada como Silvia Tornatti, también imputada en la misma causa, en ese momento como responsable de la gerencia de la firma investigada: Clinicasa SA.