Hoy, desde las 21, El Trece pondrá en pantalla el primer episodio de Esperanza mía, la tira con la que apuesta a afianzar su posición dominante en el prime time nocturno y elevar sus números de promedio mensual para alcanzar a Telefe. La idea es ambiciosa y apunta hacia muchos públicos diferentes, lo que puede redundar en un éxito gigantesco o todo lo contrario. Un juego al todo o nada.
Actualmente, el programa más visto en la televisión argentina es la telenovela turca Las mil y una noches, que se ha convertido en un fenómeno (para muchos, inexplicable) en el segundo slot del prime time de lunes a viernes, con una audiencia que suele superar los 20 puntos según Ibope. Sin embargo, ese éxito no le alcanza a El Trece para liderar el rating ya que en el primer trimestre de 2015 se ha visto mes a mes –aunque no por mucho– superado por Telefe, que aunque queda segundo en el horario central, suma en el resto de los horarios.
Esperanza mía puede convertirse, mientras se desarrolla lo que queda –aún bastante– de Las mil y una… y el canal se prepara para que la última parte de la noche vuelva a ser hogar de Marcelo Tinelli, en un generador de rating grande que le permita a la señal de Constitución achicar diferencias con Telefe o incluso superarla. Los elementos puestos en juego en esta producción parecen combinar las necesidades de un público muy amplio –de un rango etario que va desde los 10 años hasta los adultos– en un solo formato.
En primer lugar, el protagónico de Lali Espósito es central para, además, generar espacio musical y congregar fans. Pol-ka conoce bien el know-how del asunto, ya que es responsable para Disney Channel del megaéxito Violetta. Pero la otra especialidad de la casa es la comedia costumbrista, y la historia de Esperanza mía combina ambas cosas. Una joven (Espósito) cuya madre adoptiva ha muerto como consecuencia de los manejos inescrupulosos de una fábrica tiene las pruebas para poner a los responsables tras las rejas. Viajando desde su pueblo del interior hasta Buenos Aires conoce a un joven cura (Mariano Martínez) y surge una atracción inmediata entre ellos. A la joven la persiguen y se refugia en un convento dirigido por la mejor amiga de su madre adoptiva (Ana María Picchio), quien decide protegerla haciéndola pasar por la novicia Esperanza. Entre las monjas, sabemos, figura la verdadera madre de la joven (Gabriela Toscano). El elenco incluye también a Rita Cortese, Federico D’Elía, Alejandro Fiore, Carola Reyna y a varias estrellas de la comedia musical argentina como Karina K, Vanesa Butera o Gipsy Bonafina, dado que la apuesta musical –de allí el megashow de presentación en La Plata hace diez días– es clave para el negocio alrededor de la tira.
Si el arranque supera los 24 puntos –competirá con Escape perfecto, que le da buen resultado a Telefe– y promedia más de 20 en la primera semana, la apuesta será exitosa. Empieza la competencia grande de 2015.
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