Luego de un repuesto del tomógrafo del Hospital Escuela, que ya está en funcionamiento, ahora las restricciones afectan al Banco de Sangre. En el Día Mundial del Donante, desde la cartera sanitaria señalaron que un procesador celular se halla demorado en la Aduana.
Más adelante y en rueda de prensa, el subsecretario de Salud, Ricardo Cardozo, informó que la Provincia está a la espera de que la Aduana argentina libere un equipamiento alemán de úl-tima generación donado por el Banco Provincia de Co-rrientes.
Se trata de un equipo de aféresis Comtec, un procesador celular de flujo continuo que contribuirá a una donación más eficiente, “ya que sirve para extraer de la sangre del donante solamente el elemento que se necesite, co-mo ser plaquetas o glóbulos rojos, entre otros, significando un gran avance para el Banco de Sangre”, aclaró el funcionario.
No es la primera vez que la cartera marca los inconvenientes que causan las trabas en las importaciones. El Litoral había anticipado que el tomógrafo del Hospital Escuela se hallaba sin funcionar por una avería y cuyo repuesto se encontraba de-morado entre papeles de ingreso.
No obstante, semanas después el repuesto ingresó. Se trataba de una lámpara que requería ser cambiada. Es que el equipo del Escuela, un tomógrafo computado helicoidal de dos canales Gene-ral Electric, había hecho más de 250 mil disparos des-de su adquisición en 2010.
Un trayecto similar tuvo otra donación de la Fun-dación del Banco de Corrien-tes. El ecógrafo del Pediá-trico “Juan Pablo II”, finalmente ya se encuentra en la institución. Con un valor de 300 mil pesos, estuvo dos me-ses demorado.
El equipo que está destinado al Banco de Sangre tiene como objetivo facilitar y optimizar la labor de cientos de personas que cada día contribuyen a mejorar el sistema sanitario.
“No importa para quién se dona, porque en cada mo-mento existe alguien que está necesitando ese recurso para recobrar su salud”, dijo ayer el referente provincial del Plan Nacional de Sangre, Martín Espinoza, en un acto en homenaje a los donantes.
Del encuentro también participaron el director ge-neral de Gestión Hospitala-ria, Eduardo Pujol, y el di-rector del Banco de Sangre Central, el pionero, Luciano Pisarello. Así, se distinguió a Edith Solís, representante de la Asociación de Donantes de Caá Catí, a Graciela Can-teros, quien además de do-nar sangre, le donó un riñón a su esposo. También se reconoció a Adolfo Sesin de la asociación del barrio Nuevo, que articula acciones con el Caps.
Por la tarde, en tanto, el equipo de trabajo se apostó en la plaza Vera para brindar información.
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