Los candidatos de las principales fuerzas en General Pueyrredón se preparan para cerrar sus campañas de cara a las elecciones. Mientras varios de ellos miran atentos las encuestas, otros las desconocen y apuestan a la tracción de los postulantes provinciales. En este panorama, mientras desde el oficialismo piensan en ganar a pesar de la mala gestión del alcalde, desde el kirchnerismo esperan un "voto castigo" que les abra las puertas al batacazo electoral.

Esta elección va a tener un paradoja: a pesar del desastre que está haciendo Arroyo, Cambiemos va a ganar la elección 

Sin dudas Mar del Plata, centro del distrito de General Pueyrredón, maneja uno de los escenarios principales para mostrar a los candidatos de cara a las elecciones primarias del próximo domingo. Es por ello que varios referentes provinciales la eligieron en algún tramo de la campaña. Así, mientras Cristina Fernández confió allí el lanzamiento de Unidad Ciudadana, María Eugenia Vidal visitó la ciudad balnearia ayer en una suerte de cierre de campaña. En tanto, Sergio Massa y Florencio Randazzo también aportaron lo suyo con varios actos partidarios.  

Lejos de una polarización, las cerca de 550 mil personas habilitadas para votar el próximo trece de agosto deberán elegir entre 25 listas distintas, de las cuales se destacan la alianza oficialista Cambiemos, que lleva como primera candidata a Vilma Baragiola; el frente kirchnerista Unidad Ciudadana que tiene dos variantes, Marcos Gutiérrez y Aldo Albarracín; la coalición 1País que va con Ariel Ciano; el espacio vecinalista Acción Marplatense con las nóminas de Marcelo Antime y Juan Rey; y tres listas internas del frente randazzista Cumplir.

Con este escenario local comenzaron a circular hace varios días las encuestas que miden la intención de voto en General Pueyrredón. En este sentido, según un estudio de Analogías realizado entre el 18 y 19 de julio pasado, la pre candidata a senadora de Unidad Ciudadana Cristina Fernández sacaría un 33,7 por ciento, contra un 20 por ciento del pre candidato al mismo cargo nacional por Cambiemos Esteban Bullrich. Algo más abajo se ubica Sergio Massa con el 18,1 por ciento y Florencio Randazzo con el 4 por ciento.

Aunque si se muestra la pelea entre frente electorales, Cambiemos se quedaría con el primer lugar con el 33,8 por ciento y Unidad Ciudadana bajaría al segundo con el 32,8 por ciento. En tanto 1País se quedaría con el 15,5 por ciento y el FIT superaría a Cumplir con el 3,5 y 3,1 por ciento, respectivamente.

“Sabemos que nos va a ir bien pero sin dudas nos va a ir mejor en octubre. La situación económica va a mejorar y las obras públicas van a ser más claras”, aseguraron a INFOCIELO desde la Coalición Cívica, aunque reconocieron que de cara a los comicios esperan saldar las “diferencias” con el intendente Carlos Arroyo. “Somos muy críticos de la gestión local, pero sin dudas el trabajo de Macri y Vidal van a ser trascendentes y esperamos que con la nueva conformación del Concejo, la gestión en la ciudad esté más adaptada a los valores y modos de gestionar de Cambiemos”, dijeron.

Las diferencias entre la gestión provincial y local develan un constante desgaste desde el inicio. De hecho, en los dos últimos eventos importantes, Vidal y Arroyo no se vieron las caras. A principios de julio, la gobernadora encabezó el acto de reinauguración de servicios de trenes y, más pronto, protagonizó un acto partidario que sirvió a modo de cierre de campaña. En ninguna de las oportunidades estuvo el jefe comunal.

“Esta elección va a tener un paradoja: a pesar del desastre que está haciendo Arroyo, Cambiemos va a ganar la elección”, apuntaron también desde la Unión Cívica Radical a este portal, a la vez que predijeron “un buen resultado” que les permitará ingresar entre cinco y seis concejales.

Por su parte, desde Unidad Ciudadana observaron esta “falta de diálogo” entre Vidal y Arroyo de manera negativa, ya que, dijeron, “profundiza las problemáticas políticas y económicas en la ciudad”. “En los últimos 20 meses observamos una crisis en distintos ámbitos que van desde la renuncia de 30 funcionarios de primera línea, hasta la falta de recursos para saldar la desocupación creciente”, remarcaron a este medio desde la lista que encabeza el kirchnerista Marcos Gutiérrez.

Aunque el eje de campaña del kirchnerismo pareciera claro desde su rol opositor, los cortocircuitos internos sin dudas dejaron heridos en el camino. Es que de las cinco listas que intentaron competir sólo fueron habilitadas dos. La de Gutierrez, respaldada por la diputada nacional de La Cámpora Fernanda Raverta, y una boleta corta que encabeza Aldo Albarracín. Así en un reeditado “baño de humildad” local, los dos candidatos apuestan a la tracción de la ex presidenta y a la variable “castigo” sobre la gestión del intendente para hacer una buena elección.