Hubo bombas de estruendo, bombos y cánticos por parte de representantes de sindicatos (Sutcapra, Uocra, y Sindicato de Trabajadores Municipales), agrupaciones sociales y políticas. Los concejales Martín Pando y Daniel Monfasani responsabilizaron al intendente de pagar a gente, “son empleados municipales, vamos a dar por terminada la sesión, además el intendente no dice nada” acotó el presidente del bloque justicialista. El concejal Victor Secchi dijo con voz quebrada: “hago responsable por lo que me pueda suceder a mi y a mi familia”, y agregó tras su exposición: “este es un gobierno re corrupto”. La mayoría de los ediles opinaron que no estaban dadas la condiciones para continuar mientras que Sandra Mari disintió. El intendente en su análisis minimizó los incidentes: “estaban las condiciones para seguir” en cuanto a la movilización acotó: “el sonido de los bombos fue el mismo que escuché en Vuelta de Obligado cuando me gritaban en el discurso que di al lado de la Presidenta” “esta noche me dijeron un montón de barbaridades para que reaccione”.

Antes de los incidentes y suspensión de la sesión, el intendente negó los argumentos del pedido de interpelación sobre el transporte público. En todo momento resaltó su accionar basado en la conservación del servicio, agregó que no hubo incumplimiento por parte de Caso y que el municipio no perdió un peso en el acuerdo. En varios momentos las respuestas eran contestadas por el Secretario de Obras Públicas, Arq. Pedro Restelli. Hubo consultas por las negociaciones que se realizaron entre julio y noviembre del año pasado y reproches por no derivar el tema al HCD, mientras el ejecutivo aclaró que en las reuniones de la comisión fiscalizadora no se realizaron por falta de quórum.