En tanto, evitó considerar si está a favor de crear una Defensoría de los Inquilinos, como propone Patria Grande. “El Estado puede regular en cuestiones que hacen a la garantía, la seguridad, pero el mercado innegablemente ejerce también su acción, ahí habría que ver hasta donde debería y podría intervenir el Estado”, consideró luego.

Y agregó: “Es un tema bastante complejo, me incluyo porque si bien tengo mi propiedad,  lo vivo como parte, como concejal representando a la gente, porque es un tema muy extendido en Tandil, ya que no alcanzan las casas en Tandil para la demanda que hay y es una ciudad donde hay más unidades familiares que viviendas, y muchas de ellas están desocupadas”.

Por último, en declaraciones a "Radio Tandil" (AM 1140), rescató la herramienta del municipio para cobrar alícuotas más caras a los terrenos baldíos y opinó que un terreno en Tandil cuesta entre 200 y 250 mil pesos, “precio sideral para una joven pareja que quiera construir su casa”.