El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Burgos llama al entendimiento entre la empresa Urbaser y los trabajadores ante el anuncio de huelga indefinida desde el 3 de abril por las discrepancias en la negociación del convenio colectivo. Temiño asegura que lo que debe velar es por el cumplimiento del contrato. "Los conflictos entre empresa y trabajadores nos preocupan, evidentemente, somos la entidad que está contratando, pero no es un servicio municipalizado y no podemos asumir ningún rol negociador". 

En este sentido, instó a las partes a llegar a un acuerdo para no causar ningún perjuicio a la ciudadanía. "El anterior contato indicaba que el Ayuntamiento asumía las subidas salariales que se hicieran mediante revisiones de precios anuales pero ahora no es posible por la Ley 2/2015 de 30 de marzo de Desindexación de la Economía Española. Esta ley fija cómo deben hacerse las revisiones de precios en los contratos públicos y eso es lo que hemos cumplido escupulosamente a la hora de fijar esas revisios. Empresa y sindicato sabían que el canon no puede revisarse en los primeros años de contrato", apuntó, de modo que si se produce una subida salarial en las negociaciones, lo debe asumir la empresa. "El Ayuntamiento no es el empleador, la institución lo único que tiene que garantizar es que se cumpla el contrato". 

El principal escollo en las negociaciones radica en la subida salarial, aunque los sindicatos que conforman el comité de empresa, un total de seis, no la quieren dar a conocer. El día 15 hay una nueva reunión en el Serla en la que ambas partes se volverán a ver las partes. La plantilla está formada por 252 empleados.