En el año en el que se cumple su 70 aniversario en España, Coca-Cola quiere celebrarlo redoblando su apuesta por su envase más icónico y sostenible para la hostelería: su botella de vidrio.

Coca-Cola siempre ha estado cerca de la sociedad y de los temas que le interesan y preocupan, y en este caso, está realizando esfuerzos importantes por innovar y, a la vez, lograr un planeta mejor. Coca Cola lleva años embarcada en una ambiciosa estrategia de sostenibilidad con compromiso decidido de alcanzar 'Un mundo sin residuos', y en su estrategia de sostenibilidad 'Avanzamos', apostando por la innovación para conseguir crear envases cada vez más sostenibles.

En hostelería, la apuesta de la compañía es decidida por el vidrio.

Sin duda. Por un lado, es el formato idóneo en el canal hostelería, donde cumple un papel clave. Cuenta con un diseño reconocible, y cada restaurante o bar, puede adaptarse a cualquier tipo de consumidor por su amplio portfolio. Mejora las opciones de atención de la hostelería a sus clientes, ya que según un estudio de Conecta para Coca-Cola, el 80% de los consumidores prefiere el envase de vidrio cuando acude a un establecimiento hostelero, y destacan de él su iconicidad, su calidad, la experiencia y su sostenibilidad.

"El 80% de los consumidores prefiere el envase de vidrio cuando acude a un establecimiento hostelero, y destacan de él su iconicidad, su calidad, la experiencia y su sostenibilidad"

No hay nada como una Coca-Cola en botella de vidrio.

Es, sin duda, el envase que provee de la mejor experiencia de consumo y el más sostenible para la hostelería. Es retornable y cuenta con 25 vidas de media antes de ser reciclado, lo que equivale a una media de 6 años. Según el último informe de sostenibilidad de Coca-Cola en España, el 91% del vidrio que produce es retornable. La gestión sostenible de los envases es uno de los principales retos de Coca-Cola, que trabaja para utilizar menos materiales en los procesos productivos, y recoger y reciclar todos los que se utilizan.

La botella de Coca-Cola es icónica, casi podríamos decir que es parte de nuestra cultura.

Así es, Coca-Cola produjo la primera botella de vidrio en España en 1953. Desde entonces, el vidrio, como envase exclusivo y único para la hostelería, ha sido una apuesta constante en el negocio de Coca-Cola. En 2015 presentó la botella Contour el envase de vidrio retornable, inspirado en la icónica botella de 1915 (el primer envase de vidrio en patentarse en el mundo). En 2017, llegó Royal Bliss para el canal de la hostelería, una innovadora gama de mixers, también en formato vidrio retornable. Ese mismo año, lanzábamos la nueva botella de Fanta, más ligera y con mayor capacidad.

"Coca-Cola tiene un objetivo claro: innovar en todos sus procesos utilizando sus recursos y canales para impulsar un cambio duradero en el comportamiento de los consumidores"

El año pasado se sacaron al mercado las botellas con tapón adherido que facilitan el reciclaje de todo el envase.

Coca-Cola tiene un objetivo claro: innovar en todos sus procesos utilizando sus recursos y canales para impulsar un cambio duradero en el comportamiento de los consumidores, es decir, que disfruten de sus bebidas, pero fomentando también, la recogida y el reciclaje del envase. Con los tapones adheridos a la botella se quiere facilitar a los consumidores este proceso de recolección y recogida, ya que este nuevo sistema permite reciclar la botella junto al tapón, facilitando el desarrollo.

Estos nuevos tapones suponen un gran paso para Coca-Cola en su hoja de ruta y apuesta por la eco-innovación.

Este nuevo hito responde al compromiso de Coca-Cola de adaptarse a la normativa y legislación europea, apostando de forma constante por la innovación, por impulsar proyectos que tengan el foco puesto en el consumidor y que, promoviendo hábitos más sostenibles como el reciclaje, contribuyan a alcanzar el objetivo global de Coca-Cola de alcanzar 'Un mundo sin residuos'.