Argentina e Italia están empatados 1 a 1. El primer día dejó abiertas todas las posibilidades. El punto del dobles, a jugarse hoy desde las 13, adquiere una importancia suprema.
Sin dudas, el empate 1-1 tras la primera jornada no resultaba antipático para las expectativas argentinas. Pero tras el gran impacto que produjo Berlocq (44º en el ranking mundial de la ATP) al vencer a Andreas Seppi (31º), la posterior caída sin atenuantes de Juan Mónaco (40º) ante Fabio Fognini (15º) hizo que la tarde cayera con un sabor agridulce para el capitán Martín Jaite y su equipo.
El dobles de hoy, en consecuencia, tendrá una importancia capital para el destino de la llave.
A primera hora, Berlocq se rehizo de un comienzo negro y revirtió por completo su historia ante Seppi, al que venció por 4-6, 6-0, 6-2 y 6-1, luego de dos horas y 36 minutos de acción. A continuación, Fognini sólo encontró oposición en el primer set, para batir con mayor facilidad que la prevista a un desconocido Mónaco, por 7-5, 6-2 y 6-2, en apenas dos horas y 2 minutos.
Las condiciones climáticas (sol, nubes, viento y llovizna) resultaron tan cambiantes como el desarrollo del encuentro que el "Gladiador" Berlocq dio vuelta tras un inicio muy flojo.
El chascomusense, quien se formó tenísticamente en Mar del Plata, arrancó muy atado, equivocó el plan de juego y Seppi lo arrolló con su derecha ganadora. Cuando Berlocq le buscó el revés, sus golpes quedaron demasiado cortos y el italiano conservó la iniciativa y dominó con un tenis sencillo y efectivo. Seppi quebró el saque del argentino en el primer y tercer games y se ubicó 4-0 arriba, con inmejorables perspectivas.
No obstante, el partido cambió abruptamente. Berlocq cambió la estrategia y, también, encontró más profundidad, con la premisa de esquivar la derecha de Seppi. El argentino creció en su juego, mejoró con el servicio y al mismo tiempo su rival fue perdiendo precisión. La levantada de Berlocq llegó hasta el 3-4. Y aunque no le alcanzó para rescatar el capítulo de apertura, al menos estableció un contexto diferente de partido. Estaba set abajo pero jugando de igual a igual.
Con la confianza en alza, Berlocq se adueñó del partido. Con autoridad y también con la complicidad de un Seppi que perdió por completo la brújula.
El rotundo desarrollo del set le permitó al chascomusense ganarlo en blanco, y en la medida que su tenis y su mentalidad cotizaban en alza, se desmoronaba Seppi.
Sorprendió que el italiano prácticamente se rindiera sin luchar. Su fragilidad espiritual se trasladó a su juego y también a su movilidad. Entre los winners de revés de Berlocq (17 en todo el partido, la mayoría paralelos) y los errores no forzados de Seppi -llegaron en cantidades industriales-, casi no hubo partido. El europeo se entregó antes de tiempo y la primera gran imagen del día fue el ya clásico festejo de "Charly" rompiendo su remera de cara a la gente.
El excelente impulso anímico aportado por el "Gladiador" se esfumó a la hora del segundo punto. Mónaco estuvo apagado, lejos de su nivel, y Fognini, luego de algunas dudas en el segmento inicial, hizo valer sus credenciales de 15 del mundo y su actualidad que le reportan vivir el mejor momento su carrera.
Su talento natural lo despliega casi sin esfuerzo. Y nunca, salvo en el comienzo, se lo notó incómodo, pese al viento molesto y alguna llovizna intermitente.
La irregularidad de ambos caracterizó al primer parcial. El tandilense quebró en el cuarto juego (3-1), pero enseguida cedió su propio servicio en el game siguiente. Mónaco volvió a vulnerar el saque de Fognini en el octavo (5-3) y sacó en el siguiente para quedarse con el set. Jamás encontró la consistencia necesaria ni lo afrontó con decisión, quizás en el único momento de flaqueza de su oponente.
Esa duda de Mónaco le abrió la puerta a Fognini, quien fue afirmando su juego. Con numerosos recursos y ante una frágil resistencia del tandilense, sumó cuatro games consecutivos y selló el set con un ace de segundo saque a la "T", a sólo 167 km/h.
Lo que sucedió a continuación se pareció bastante a lo ocurrido en el partido anterior, sólo que esta vez se vio beneficiado Italia. Mónaco incrementó su margen de error y permitió dos "breaks" de Fognini (en los juegos quinto y séptimo), que cada vez lucía más sólido con una derecha que abrió espacios en forma continua.
Con el resultaado en contra por dos sets, a "Pico" sólo le quedaba la heroica. El público así lo entendió y empezó a alentarlo como nunca en la tarde. Pero su tenis ya lo había abandonado hacía rato y el tandilense no pudo responder. De movida en el tercer set perdió su servicio y para peor, siempre corriendo desde atrás, tuvo un break-point a favor en el sexto game y lo "rifó" con un error no forzado (una derecha que se fue larga). Era chance quedar 2-4 y Fognini salió indemne, con un 5-1 imposible de remontar. Fue final y festejo mesurado de todo el banco italiano. Empate lógico y justificado.
El dobles será más clave que nunca
Mar del Plata vibra con la Copa Davis y hoy lo hará de una manera más especial todavía. Porque Horacio Zeballos, el mejor tenista que dio esta ciudad después del gran Guillermo Vilas, será protagonista del partido de dobles.
Desde las 13, en el Patinódromo, el zurdo del Edison Lawn Tenis, en compañía de su amigo, el santafesino Eduardo Schwank, afrontará el punto que desatará la serie ante Italia, por ahora empatada 1-1.
Si bien el capitán italiano, Corrado Barazzutti, anunció que su equipo formará con Simone Bolelli y Filippo Volandri, es casi un hecho que Fabio Fognini ingresará a la dupla en reemplazo de este último.
Zeballos es el jugador con mejor ranking internacional en dobles contando a todos los protagonistas de la serie. Figura en el puesto 40º de esa especialidad.
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