Las miradas por estos días apuntan al bloque del Frente Renovador (12 manos), sobre todo si se tiene en cuenta la reunión que la semana pasada mantuvieron la mencionada Vidal y el ex diputado Sergio Massa. De todos modos, estos no serían suficientes. La clave sería el flamante Frente Amplio Justicialista. En el Senado, que es por donde ingresará la ley de leyes, si alcanzará sólo con los votos de los renovadores.
En la jornada de hoy ingresará a la Legislatrura bonaerense el Presupuesto 2019, el cual incluye, al igual que los años anteriores, un importante endeudamiento (en principio unos 85 mil millones, pero podrían ser 100 mil). Esa es justamente la clave. Para su aprobación, el oficialismo que conducen el presidente de Diputados, Manuel Mosca y el titular del bloque, Maximiliano Abad, necesitan dos tercios del total de los votos.
Y en principio se arranca bastante lejos, ya que la bancada oficialista no cuenta ni siquiera con la mitad más uno. Por eso, para lograr ese tan ansiado número es parte son parte de
las negocoaciones la mismísmisa Gobernadora María Eugenia Vidal y su principal espada política, el jefe de Gabinete Federico Salvai, entre otros.
¿De dónde se sacan lo votos necesarios? De los 22 integrantes de Unidad Ciudadana, seguro que no. Del monobloque de la Izquierda, seguro que tampoco. Las miradas por estos días apuntan al bloque del Frente Renovador (12 manos), sobre todo si se tiene en cuenta la reunión que la semana pasada mantuvieron la mencionada Vidal y el ex diputado Sergio Massa. Y como se informó, habrá otra en breve.
Por si fuera poco, el diputado nacional Felipe Solá, recién salido del massismo, afirmó sin vueltas ayer que el Frente Renovador “estaría por concederle” a la gobernadora los dos
tercios que necesita en la Legislatura para aprobar el endeudamiento, supuestamente a cambio de desvincular las elecciones provinciales de las de intendente y concejales.
“A cambio, se pide algo difícil: que se desliguen las elecciones para intendentes y concejales de las elecciones provinciales, lo cual generaría un desmembramiento de la unidad
partidaria, de cada alianza o partido”, y resaltó que “cada cual hace su negocio primero y después elige y eso genera cortes verticales en las lealtades”.
Desde el propio massismo, reconocieron el pedido, lo que se pide a cambio de los votos para el endeudamiento. “Lo que se busca es darle autonomía a los municipios y las elecciones separadas aportan en ese sentido”, explicó un legislador y dijo que “además no acarrearía gastos ni a la Provincia, ni a la Nación y sería controlada por la junta electoral bonaerense”.
Inclusive, los massista se apoyan en que “la constitución nacional establece que las constituciones provinciales deberán darle mayor autonomía a los municipios, por eso las mayorías de las provincias se adaptaron y tienen el sistema de elecciones para intendentes separadas de los cargos provinciales y nacionales”.
Igualmente, si el massismo diera el sí en su totalidad (hay que tener en cuenta que hay rumores de una cercana ruptura), las voluntades totales para aprobar el endeudamiento no serían suficientes. Faltarían aún unos cuatro votos más. Y esos saldrían de la recientemente creada bancada del Frente Amplio Justicialista, integrada por Rocío Giaccone, José Ottavis, Alejandra Martínez y Juan Manuel Cheppi, todos "amigos" de Cambiemos.
En caso que fuera necesario, tampoco le resultaría imposible a los amarillos conseguir votos o ausencias el día de la sesión en la bancada de los intendentes (N de la R: ya sucedió en oportunidades anteriores), actualmente con siete componentes (Julio Pereyra, Fabiana Bertino, Guillermo Escudero, Marisol Merquel, Federico Otermin, Carlos Urquiaga y Pattici Moyano).
Por las dudas, quedarían dos votos sueltos. Uno, quizá un poco más lejano, el de Patricia Cubría, de Convicción peronista, que algunos dicen se uniría al futuro bloque de Red x Argentina, la bancada que formarán los que se vayan del massismo, entre ellos Pablo Garate. Por ahora, vale aclarar, sólo se trata de versiones. El otro voto suelto es el de Fabio Britos, de Integrar, espacio cada vez más vidalista. Por caso, uno de sus líderes, Mauricio D'Alessandro, se postuló para Vice de la Gobernadora en 2019.
Las dudas empezarán a despejarse ya con el presupuesto en mano. Pero lo cierto es que a Cambiemos, sobre todo en Diputados, no le será sencillo conseguir los votos necesarios parea que Vidal cuente con su Presupuesto 2019 y el siempre polémico endeudamiento, Con Unidad Ciudadana y la Izquierda, imposible negociar. Con los demás legisladores, todo puede pasar. En el oficialismo sobre confianza, más allá de lo que haya que ceder.
Por último, en lo que respecta a la Cámara alta, la provincia necesita solamente del acompañamiento de los dos senadores massistas, Fernando Carballo y José Luis Pallares, para alcanzar los dos tercios del recinto. este tema ya habría sido charlado entre Vidal y Massa. Y se terminará de definir -como se dijo antes- el encuentro que se llevará a cabo en los próximos días,
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