El ex presidente está en Europa y volverá el 20 de marzo, para la etapa de definiciones. Entre acercamientos, presencias e indicaciones para actos de lanzamiento y la moderación de su figura, se muestra alejado de una boleta pero cercano a las definiciones electorales.
Por CARLA PELLIZA
El panorama electoral de Juntos por el Cambio no está para nada ordenado y mostró, hasta ahora, múltiples nombres que podrían ir a una PASO, tanto por el macrismo como por el radicalismo. De todos modos, todavía hay quienes consideran que el enfrentamiento será mano a mano entre dos fórmulas lideradas por el PRO y secundadas por la UCR. Pero para eso falta mucho y si algo se instaló fue la invocación a la paciencia. El que se apura pierde y los tiempos se estirarán hasta el final, por lo tanto también las definiciones.
Después de algunos lanzamientos, pero varios pendientes, quedó claro que Mauricio Macri será un actor fundamental para inclinar la cancha pero también para moderar (moderarlo a él). El ex presidente, que se fue a Europa y recién volverá el 20 de marzo, ya es descartado abiertamente como posible candidato. La única que aún no se animó a plantearlo fue María Eugenia Vidal, cuya cercanía con el líder amarillo se acrecentó tanto en el último tiempo que su presentación en sociedad para la carrera hacia las urnas fue en dupla con él.
Eso llamó la atención dentro de las filas larretistas porque ocurrió el mismo día en que el jefe de Gobierno porteño decidió anunciar su propia candidatura. Fue el propio Horacio Rodríguez Larreta el que, cuando el vínculo con Macri era frío, “rescató” a Vidal de su abrupta retirada tras la derrota amplia en 2019. Si bien su futuro todavía es incierto, la mayoría cree que la ex gobernadora no terminará jugando por la Rosada. Pero, si lo hiciera, la gran pregunta es a quién perjudicaría más.
Esa es una cuenta que todavía no fue hecha. Por su perfil más duro y cercano a Macri, podría quitarle votos a Patricia Bullrich. Pero por su intención de colocarse fuera de la grieta amarilla entre halcones y palomas, también podría complicar a su amigo de dos décadas. Aún no se midieron las conveniencias pero entre las teorías circulantes está la que indica que el ex presidente la impulsa a ella para erosionar al jefe de Gobierno.
También, según circuló por estas horas, le habría dado un espaldarazo a Facundo Manes, que cultiva el perfil de la moderación. Se reunieron la semana pasada en Los Abrojos pero desde el entorno del ex presidente aseguran que Mauricio sólo apoya a los nombres PRO, a ninguno más. Lo cierto es que el neurocientífico estuvo este fin de semana con Bullrich y Alfredo Cornejo, dos de los exponentes de la construcción halcona de la oposición. El tridente Mauricio – Facundo – Patricia mantienen diferencias profundas pero coincidencias claras sobre el cambio profundo que necesita el país.
El diputado también estuvo, pocos días antes, con Gustavo Valdés, el gobernador de Corrientes que, sin apuros por una candidatura, pivotea entre todos los candidatos y buscará destronar a Gerardo Morales de la conducción de la UCR. El mandatario del litoral se convirtió en una suerte de contención para el neurocientífico, algo que podrá capitalizar en su pelea por el partido centenario.
Las diferencias con el jujeño se acrecentaron en el último tiempo. Un sector del radicalismo empezó a considerar que usó al partido como excusa para su campaña electoral y que cerró acuerdos sin consultar con el resto. Por eso, el bullrichismo empezó a trabajar hace tiempo el incentivo de la construcción de una línea interna que se aleje de Morales, de Martín Lousteau y, por extensión, de Larreta.
De la foto del fin de semana en la fiesta de la vendimia, Bullrich podría sacar a su vice radical. Sin embargo, algunos nombres podrían ser descartados. Luis Naidenoff no pareciera ser una opción, Cornejo irá por la gobernación mendocina, Rodolfo Suárez también se vio más relegado, Valdés no tiene apuro pero será una figura fuerte, Rodrigo de Loredo todavía está inmerso en las internas partidarias cordobesas y Carolina Losada no definió su futuro.
El diputado cordobés está embarcado en la difícil misión de definir qué será mejor para su futuro. Como candidato a la intendencia de la capital provincial, la oposición le avizora una victoria segura. La elección por la gobernación, por el contrario, sería mucho más problemática y con una probable derrota frente al schiarettismo. De hecho, un grupo de alcaldes radicales empezó una migración de las estructuras de Juntos por el Cambio al armado oficialista encarnado en la figura de Martín Llaryora. El temor de De Loredo radica en que, como posible intendente, el schiarettista le haga la vida imposible y le complique la proyección a futuro. Cuentas que todavía restan realizar. Lo que sí, se vislumbra una disputa por el cambio generacional en el distrito.
La relación entre los dos sectores no es mala, pero la competencia puede sacar lo peor de cada uno. Macri, enemistado con Luis Juez (el otro candidato para la gobernación) se reunió con el postulante de Juan Schiaretti y se mostró cercano a De Loredo. Tal vez pueda ser el inicio de algún acuerdo. Bullrich estará, en los próximos días, nuevamente en Córdoba para trabajar esas relaciones que hasta hace un par de meses eran conflictivas y hoy se plasman en fotos compartidas constantemente.
A su regreso el 20 de marzo, Macri seguramente empezará con una agenda cargada para tiempos de definiciones. Su ausencia desde noviembre hasta el presente lo ubicó un poco por fuera de la disputa electoral pero no del rol de armador. Con Vidal, como se dijo, el vínculo es muy cercano. Larreta hizo un giro discursivo para empezar a asemejar ciertas posturas suyas con las del ex presidente y olvidar su intento de parricidio. Bullrich, en tanto, sumó nombres importantes, como el ahora colaborador Hernán Lombardi, pero no quiere correr el foco de atención.
La presencia de Macri es tan fuerte que un apoyo a uno de los candidatos convertiría la puja electoral en un mano a mano entre él y otro nombre cuando, se supone, él no sería de la partida. Para que la guerra no sea Mauricio versus Horacio, sino Patricia versus Horacio, será necesaria la moderación y el no abuso de la cercanía.
Pero todos quieren algo con Mauricio. Cristian Ritondo, que todavía no se lanzó como candidato a gobernador para esperar que se acomode el panorama, tendrá su acto en abril y se espera que el ex presidente pueda estar presente. Néstor Grindetti lo hizo junto a Patricia Bullrich por pedido de Macri. Pero la ex ministra de Seguridad podría ser el destino también del jefe del bloque PRO por una cuestión de cercanía ideológica.
Para definiciones de ese tipo faltará que corra agua bajo el puente. No todos están convencidos con sumar a Ritondo en Buenos Aires y están conformes, hoy por hoy, con Grindetti. Pero, además, el diputado es un hombre de Vidal, que aún no se bajó de la contienda. Ahí, la gran pregunta es si Bullrich estará o no en el lanzamiento del ex ministro bonaerense. La respuesta se hizo esperar.
En ese gran armado, Diego Santilli ya es el nombre puesto por el larretismo y protagonizó un show este lunes en la apertura de sesiones bonaerenses. Fue a la legislatura provincial junto a Facundo Manes, su contrincante en 2021 y con quien afianzó el vínculo tras la elección, y el jefe de los equipos técnicos de campaña, Diego Valenzuela. Según denunciaron, no los dejaron pasar al hemiciclo pero la gobernación difundió una foto de sus tres sillas vacías, esperándolos para formar parte del evento. Vieron el discurso desde el despacho de Maximiliano Abad, el otro candidato local pero, en este caso, de la UCR.
Esos nombres parecieron copar el escenario provincial, dejando en un segundo plano a Javier Iguacel y Joaquín de la Torre, que seguramente tendrán lugares importantes en el armado de Bullrich pero ya no de candidatos a la gobernación. La foto de la presidenta del PRO con José Luis Espert también le sumó pólvora a la interna, pero fue sólo una foto. Si bien el larretismo tiene intenciones de incorporarlo a Juntos, los halcones todavía no están convencidos porque podría restarle votos a sus fichas en el tablero bonaerense.
Ahora se vendrán más eventos de campaña. Bullrich estará en expoagro el jueves y continuará con las recorridas por el conurbano además de la gira por Córdoba. Larreta también hará lo propio. En lo inmediato, la oposición tendrá mucha actividad en el Congreso. Este martes se desarrollará la comisión de juicio político para tratar el expediente contra los cuatro miembros de la Corte Suprema. El fiscal Carlos Stornelli está invitado pero no asistirá. La alianza se dedicó a ser una observadora producto de su situación de minoría.
Pese a ello, sí habrá avances para tratar un tema que preocupó y mucho en los últimos días, el narcotráfico en Santa Fe. Este miércoles seguramente la comisión de Legislación Penal firme dictamen del proyecto de Ley de Fortalecimiento de la Justicia Penal en Santa Fe, que apunta a la creación de nuevas fiscalías y juzgados que agilicen las investigaciones y juicios. Luego se deberá tratar en la de Presupuesto para estar lista para su debate en el recinto, donde saldría por unanimidad.
Para Cambiemos, el proyecto fue una iniciativa propia que empezó en noviembre del año pasado con su pedido de tratamiento pero el oficialismo se negó a hacerlo. Según el Frente de Todos, concepto compartido por la oposición, el texto es transversal y está firmado por todos los diputados santafesinos pero es impulsado por Roberto Mirabella y no se trató antes porque la alianza bloqueó el Congreso y luego llegaron las sesiones extraordinarias sin su incorporación en el temario.
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