A ultima hora de ayer vencía el plazo para la presentación de frentes y alianzas que propondrán sus precandidatos a intendente de Santa Rosa en las primarias abiertas del 11 de diciembre. La inscripción de ayer no incluía los nombres de los aspirantes, pero aún así generó expectativas por lo que estaba en juego.

La novedad más importante es que el peronismo deja de lado el nombre “Frente para la Victoria” y vuelve a la tradicional lista 2 del Partido Justicialista, sello que desde 2003 no usaban.

Las otras dos novedades corresponden a las otras tres fuerzas que aspiran a colocar al sucesor del hoy detenido Sergio Salgado.

Por un lado, los dos anotados del Partido Demócrata competirán por dentro del Frente Santa Rosa Cambia, una versión departamental del Frente Cambia Mendoza que llevó a Alfredo Cornejo a la gobernación; por el otro, el Frente de Izquierda y de los Trabajadores no competirá, aunque sí lo hará uno de los dos partidos que lo componen, el Partido Obrero.

Entre las tres fuerzas anotadas suman 11 precandidatos, que pueden inscribirse hasta el viernes 21, por lo que los nombres que se digan ahora puede que no lleguen. Lo confirmado es que hay tres fuerzas que buscan conducir Santa Rosa. Son dos fechas electorales: una, el 11 de diciembre, correspondiente a la Primaria Abierta, Simultánea y Obligatoria (PASO), y la otra el 12 de febrero, para la general.

Cambios y más cambios

Desde 2011 el PO y Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) conforman el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT). En esta elección, los primeros se cortaron solos y proponen al trabajador industrial Daniel Carrizo. ¿Será el principio del fin del FIT o apenas el reconocimiento de que en Santa Rosa el PTS no tiene presencia? En los próximos meses se develará la incógnita.

El Frente Santa Rosa Cambia también tiene alguna sorpresa. Los massistas de Santa Rosa se volvieron al peronismo, así que el precandidato que en 2015 compitió por dentro de Cambia Mendoza, Richard Cobos, ahora es uno de los que se anotan para competir en el PJ. Sin embargo, los firmantes del frente oficialista son los mismos partidos que el año pasado: UCR, PD, Pro, Frente Renovador, Libres del Sur y Partido Socialista.

En el oficialismo interino de Santa Rosa había una amenaza latente, que los dos demócratas que aspiran a suceder a Salgado compitieran por fuera del frente electoral.

Ayer a mediodía, el presidente del PD Carlos Balter anunció que ambos aspirantes, el concejal y ex intendente Antonio Ponce y el jefe de liquidaciones del municipio y ex concejal Daniel Jofré, competirán por dentro: “Hablamos de la conveniencia para Santa Rosa. Y a Santa Rosa lo que le conviene es tener un gobierno distinto a lo que ha tenido en estos tres períodos. A todas luces, es bueno no dividir esfuerzos y poder tener un candidato, sea cual fuera el que resulte electo”, argumentó Balter.

Las otras dos precandidatas que se mencionan son dos radicales. Una es la concejal a cargo de la comuna Norma Trigo; la otra es la concejal y candidata que estuvo cerca de arrebatar la comuna a Salgado en 2015, Débora Quiroga.

Quiroga tiene el apoyo explícito de Julio Cobos, quien la acompañará en un acto que se realizará mañana por la noche en el club Eliseo Ortiz de Las Catitas. Pero también tiene el banque del Pro mendocino, con el intendente de Luján, Omar de Marchi.

Por el lado del peronismo hay seis precandidatos, aunque una de ellas parece ser la que corre con alguna ventaja: la ex reina de la Vendimia Flor Destéfanis, quien tiene al ex vicegobernador Carlos Ciurca apuntalándola.

Hay un candidato del sector azul, Gonzalo Sánchez, que cuenta con el apoyo del futuro vicepresidente del PJ, el intendente Roberto Righi; el concejal Celso Reta es otro precandidato, el ex funcionario de Salgado Gustavo Jofré también quiere ser, José López y el ex massista Cobos son de la partida.

La gran novedad es que el peronismo dejó de lado su emblema electoral de los últimos años. El Frente para la Victoria fue el nombre que llevó a la presidencia a Néstor Kirchner en 2003 y unos meses después el peronismo mendocino se identificó por última vez como Partido Justicialista en la boleta de gobernador.

En 2005 empezó a usar el kirchnerista FpV y desde entonces no lo abandonó hasta ahora, en Santa Rosa. Un mensaje que demuestra las ganas de enterrar una etapa que terminó muy mal en 2015.