Por Silvana Dos Santos.

La Ley de Etiquetado Frontal fue sancionada en octubre del 2021 y hace algunos meses comenzó a ser obligatorio para las grandes empresas de alimentación el uso de octógonos negros que advierten sobre nutrientes críticos en los productos comestibles. Estos son: exceso en sodio, exceso en azúcares, exceso en calorías, exceso en grasas saturadas y exceso en grasas totales.

Con la aprobación y reglamentación de la Ley 27.642 de Promoción de la Alimentación Saludable, más conocida como ley de etiquetado frontal, está prohibida la venta de la mayoría de los productos que hoy compran los chicos en los kioscos de sus escuelas: alfajores, chocolates, bombones, galletitas saladas y dulces, turrones, juguitos, gaseosas, cereales para el desayuno y todas las golosinas. Tampoco podrán vender papas fritas y otros snacks. Ni yogures, incluidos los descremados, y la leche chocolatada.

En este contexto, en diálogo con El Territorio desde el área de Nutrición del Ministerio de Educación de Misiones profundizaron la necesidad de eliminar productos con etiquetas negras en la escuela. Según detalló la profesional Mariela Bottelli, hace unos días se aprobó en la provincia una ley que promueve entornos saludables escolares. A través de la iniciativa, recorren escuelas para promocionar la importancia de reducir la venta de productos procesados y ultraprocesados que contengan el octágono negro. La propuesta es la implementación de cantinas que ofrezcan jugos naturales, frutas y productos caseros.

Etapa de capacitación

“Nosotros dentro de los kioscos todavía no podemos inferir ni controlar ni legislar, por el momento sólo recomendamos y capacitamos. Hay escuelas que se están adhiriendo por su propia voluntad y toman la iniciativa de transformar su kiosco en un kiosco saludable” detalló la nutricionista.

En la misma línea, añadió que el objetivo es hacer un relevamiento de las cantinas escolares y una vez finalizado los plazos y las capacitaciones, controlar que se regule. En los últimos tiempos, aumentó el interés de los padres en que sus hijos consuman más productos caseros y naturales. 

“En la provincia como recién está saliendo la ley todavía no se reglamentó del todo, no tenemos quién controle. Es un trabajo progresivo que se irá haciendo, pero se está brindando la información a las escuelas para que ellos puedan ir manejando de a poco y de forma paulatina”, explicó la especialista.

Escuela de El Soberbio implementó la opción de kiosco saludable.

Por su parte, la presidenta del Colegio de Nutricionistas, Florencia Córdoba, mencionó que  “aparte de las frutas y jugos naturales, una taza de leche con pan o un bizcochuelo es más recomendable que cualquier golosina que el niño consuma”.

Y en ese misma línea, se refirió al impacto de los sellos negros: “ninguno es menos perjudicial que otro. Particularmente en una sociedad con alta cifra de personas diabéticas e hipertensas, recomiendo que prioricen no comprar alimentos con excesos en azúcares y sodio. Aunque lo recomendable es que se consuma productos frescos, caseros y que no sufran alteraciones o procesos”.

La presidenta del Colegio sugirió a los padres a que también consuman alimentos saludables ya que los niños copian las costumbres no solo de la escuela, sino también del hogar. En sintonía, recomendó no guiarse por información que circula en internet sino acercarse a un profesional.

A modo de cierre, citó la experiencia de la Universidad de Buenos Aires (UBA) desde donde recomiendan evitar los alimentos ultra procesados y optar por opciones saludables, como frutas de estación y chips de batata, mandioca o banana.