LONDRES.- El gobierno de Ecuador, que tiene asilado a Julian Assange en su embajada en Londres, dijo estar "muy preocupado" por la salud del fundador de WikiLeaks, y advirtió que quizá deba salir de su refugio para atenderse en un hospital.

"Assange adelgazó mucho y estamos muy preocupados por su salud", declaró ayer el vicecanciller Marco Albuja a la radio La Voz de Rusia. "Si se enferma, habrá que elegir entre dos alternativas: tratarlo en la embajada u hospitalizarlo. Es una situación muy seria y puede afectar los derechos de Assange", agregó.

El fundador de WikiLeaks está refugiado desde mediados de junio en la legación ecuatoriana de Londres para evitar su extradición a Suecia, que lo reclama por dos denuncias de violación y agresión sexual.

Londres espera poder aplicar el mandato de detención de la justicia sueca si abandona la sede diplomática. El edificio, ubicado detrás de la famosa tienda londinense Harrods, está bajo constante vigilancia policial y las decenas de agentes que montan guardia en los alrededores aguardan a que ponga un pie en la vereda para llevarlo detenido.

Assange afirma que si lo extraditan a Suecia corre el riesgo de ser luego entregado a Estados Unidos, donde teme ser condenado a muerte por haber publicado documentos secretos del Departamento de Estado en WikiLeaks, el sitio web responsable de la filtración de miles de cables diplomáticos que comprometieron a gobiernos de todo el mundo y perjudicaron especialmente a Washington.

Pero la salud era una materia demasiado humana que nadie tenía en cuenta al momento del forcejeo diplomático de junio, cuando Ecuador le ofreció a Assange permanecer en una oficina reciclada en dormitorio, sin ventilación ni luz natural.

Corrieron versiones de que la policía tomaría la legación por asalto para capturar al australiano, pero el gobierno británico desmintió el presunto allanamiento.

Ahora Ecuador solicita garantías de que su invitado no será detenido en caso de que sea necesario internarlo. Pero, según el vicecanciller Albuja, "Gran Bretaña no ha aceptado el pedido". "No presionaremos y esperaremos pacientemente una respuesta para que Assange pueda recibir tratamiento médico si fuera necesario", agregó el diplomático.

Un vocero de la cancillería británica señaló que no habían sido notificados del estado físico del australiano. "Ecuador no nos ha informado que Assange estaba mal de salud. Si lo hace, entonces examinaremos el caso", declaró.