La Convención Provincial de la Unión Cívica Radical, sesiono el sábado último en las instalaciones del Comité Provincial del centenario partido ubicado en Moreno 463 de esta Capital.
Durante las deliberaciones se aprobaron la posibilidad de la conformación de acuerdos con otros partidos políticos, se designó tres representantes para tal efecto y se autorizoó a la adhesión de la lista que conforme la UCR a nivel nacional para la posible elección de integrantes al consejo de la magistratura, además de aprobarse un duro pronunciamiento político donde se denuncia “la reaparición de antinomias y divisiones sociales” y que denuncia entre otras cosas “La soberbia, el desconocimiento al que piensa diferente, el autoritarismo, la ceguera y la negación de la realidad son características centrales del modelo oficialista que está agotado”.
Respecto de la presentación de un pedido de adhesión al proyecto de intervención presentado como asunto entrado dado que no formaba parte del temario de la convocatoria, la asamblea decidió pasar a comisión para su oportuna evaluación. “Nos quieren convencer que es una “década ganada”. Nada más lejos de la realidad. Hoy en la Argentina podemos hablar de una década desaprovechada, una década impune, una década avasallada y una década lavada”.
SKANSKA, las valijas de Antonini Wilson, el enriquecimiento ilícito de Néstor y Cristina, Jaime, Ciccone, Boudou, negociados con el fútbol, malversación de fondos de la obra pública para llenar las bóvedas de Lázaro Báez, sus jardineros, sus choferes y todo aquel que sirva para aumentar el patrimonio de los Kirchner a costa del empobrecimiento del pueblo”. “Elegir los consejeros de la magistratura a partir de boletas partidarias para eliminar todo vestigio de independencia, exigir 18 distritos para adjuntarlos a la boleta para que solo el FPV pueda hacerlo, plantear destitución por mayoría simple para amedrentar a los jueces es un paso más hacia la Argentina de la impunidad”.
Realidad de la
provincia
“Nuestra provincia no escapa a esta realidad, con la salvedad que aquí ya llevamos 3 décadas perdidas, donde se castiga a nuestro pueblo con un proceso de empobrecimiento y pauperización propio de gobiernos feudales, cuyo único objetivo es perpetuarse en el poder, para lo cual, nuestro sistema electoral perverso en una combinación perfecta de ley de lemas y reelección indefinida es una herramienta muy eficaz”.
“Formosa es víctima de un sistema prebendario, donde los sueldos de los trabajadores son los más bajos del país y las tarifas e impuestos los más altos, los índices de mortalidad infantil nos sitúan en los lugares principales del ranking nacional, donde el analfabetismo sigue haciendo estragos y la calidad educativa se ha destruido, donde los jueces se nombran a puertas cerradas y siempre son amigos del poder”. “La falta de trabajo y oportunidades hacen emigrar a nuestros jóvenes quienes no encuentran posibilidad de futuro en una provincia que los expulsa. La problemática de vivienda se hace cada vez mas insostenible, mientras el gobernador las inaugura varias veces, no se entregan, no están en buenas condiciones o el IPV las reparte de acuerdo a la afiliación partidaria y no a las necesidades de la gente con un sistema que nada tiene de transparente”, explicaron. “La producción afronta su peor época.
La sequía, la baja de los precios, las dificultades crediticias, las prohibiciones del gobierno para el rubro, el incumplimiento de la cuota Hilton, ha obligado a muchos productores a abandonar la actividad y el monocultivo de soja se impone sobre el ganado y otros cultivos dada su baja rentabilidad” y agregaron “la violación sistemática de los DDHH en las comunidades aborígenes es un tema que hoy tiene inclusive repercusión nacional.
El reclamo desatendido por la tierra, las condiciones infrahumanas en las que son obligados a sobrevivir, la persecución constante de sus referentes y los extraños “accidentes” que ocurren cada vez con más frecuencia, la utilización perversa de las comunidades en épocas electorales, son solo ejemplos del padecimiento de nuestros hermanos aborígenes ante un gobierno que los desconoce y nada hace por mejorar su calidad de vida”.
“La inseguridad es cada vez más alta. En una provincia donde la pobreza y la droga están cada vez más presente, la inseguridad se presenta como primer consecuencia de un modelo que genera la exclusión”. “El narcotráfico es un flagelo creciente. Pistas clandestinas, radares que no funcionan, funcionarios ligados al negocio de la droga, a quienes la justicia no investiga, son solo el iceberg de un problema muy profundo. El narcotráfico se está instalando en Formosa que parece ser una zona casi liberada”, afirmaron.
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