La Subsecretaría de Transporte trabaja a contrarreloj en la reglamentación, con el riesgo de no llegar a tiempo para el inicio del próximo ciclo lectivo y con numerosos inconvenientes para ponerlo en práctica.
En la Subsecretaría de Transporte de Misiones se trabaja a contrarreloj en la reglamentación de la Ley de Boleto Educativo Gratuito, con el riesgo de no llegar a tiempo para el inicio del ciclo lectivo del año próximo, y con numerosos inconvenientes para ponerlo en práctica.
De acuerdo a algunos comentarios que realizó el subsecretario Hermes Almirón y a información a la que accedió PRIMERA EDICIÓN, el principal problema es la falta de información o base de datos de la cantidad de usuarios que utilizarán este servicio.
Salvo Posadas, Apóstoles y Oberá, que tienen sistemas digitales de registro y seguimiento de los boletos y usuarios, el resto de los municipios es un “mundo desconocido”. Según admitió el funcionario, se están manejando con la información que brindan las empresas de cada región, pero a la vez esa información genera muchas dudas, no porque no sea confiable, sino porque el grupo de usuarios es totalmente desconocido.
No hay registros ni datos acerca de cuántos estudiantes usarán el servicio urbano, cuántos utilizarán el interurbano, no hay registro del recorrido que realizará cada uno. Por ahora, los datos que proveen las empresas refieren a aquellos estudiantes que compraron el bono escolar o universitario, pero a estos se sumarán los que no usaban el servicio o lo usaban pero sin comprar bonos.
Quiere decir que hay un universo de pasajeros desconocido: son aquellos a los que sus padres los llevaban en vehículo propio (auto o moto), los que usaban combis o transporte escolar, los que pagaban el pasaje sin el bono escolar, los que caminaban porque les quedaba a pocas cuadras, incluso aquellos que vivían a cien kilómetros o menos de la facultad y alquilaban un departamento, probablemente ahora se ahorren el costo del departamento y utilicen el servicio de transporte gratuito todos los días. Todas estas alternativas se analizan y seguramente generarán numerosas complicaciones que irán apareciendo una vez que empiece a funcionar el sistema. En Transporte especulan que será un principio de año agitado, según informaron a PRIMERA EDICIÓN.
El propio Almirón reconoció que “necesariamente las empresas, al tener mayor tasa de uso, necesitarán más unidades, si un estudiante del interior estudia en Posadas, tenemos que calcular cuantos pasajes interurbanos y urbanos necesita”.
Una situación que seguramente se presentará, porque así ocurrió en otras ciudades, pero que todavía no se habla del tema; es la de los transportes escolares o combis. En Córdoba y otras provincias ocurrió que perdieron gran parte de su negocio al instaurarse el boleto educativo, por lo tanto, también estas empresas reclamaron al Estado un subsidio para llevar a los estudiantes en forma gratuita. Si esto ocurre, la lógica del Estado probablemente sea priorizar el transporte público, según las charlas previas entre los funcionarios de la Subsecretaría.
“Estamos haciendo los cálculos y números finos para tratar de llegar con toda la base de datos, para el comienzo del ciclo lectivo. El Sistema Integrado y sólo dos municipios del interior tiene información, ya que utilizan boleto electrónico. El problema que tenemos ahora es la falta de información sobre el flujo de transporte de estudiantes en el interior”, señaló Almirón en declaraciones a Radio República, reconociendo los importantes problemas que tiene para implementar el sistema y anticipándose a eventuales inconvenientes que surgirán.
“Hasta el momento hay una ley que preveía un descuento de entre un 20 y un 50% para estudiantes. Hay una masa de alumnos que no utilizaba esta ayuda que se convierte en los pasajes más caros. Estamos con nuestros contadores haciendo los cálculos, los números finos analizando los datos, además los tiempos apremian ya que con el ciclo lectivo del año que viene el mecanismo de boleto gratuito debe estar funcionando”, añadió el funcionario.
Cálculo de 20 millones
De acuerdo a los cálculos realizados hasta el momento en Transporte, la suma aproximada que significará el boleto educativo gratuito llega a 20 millones de pesos mensuales, de mínima. Sobre esto, están calculando un incremento en la tasa de utilidad de 30%, que es para contemplar a todos los usuarios que se incorporarán al boleto gratuito y que ahora no lo están utilizando, pero que seguramente lo harán cuando empiece a regir.
Se estima que las empresas, tanto interurbanas y urbanas deberán incorporar unidades porque crecerá el uso del transporte. “Si hoy es casi imposible encontrar un asiento de un micro interurbano, un domingo a las 6 de la tarde en cualquier pueblo del interior, imaginate lo que será cuando el boleto sea gratuito, no van a dar abasto las unidades”, se sinceró un alto funcionario de la Subsecretaría de Transporte, preocupado por la situación.
Saben en el organismo que los usuarios crecerán, pero no saben cuánto será ese crecimiento.
También creen que se reducirá, principalmente en las ciudades grandes, la congestión del tránsito ya que muchos padres que llevaban en vehículos propios a sus hijos a la escuela, dejarán de hacerlo.
Sobre la manera es que los estudiantes podrán acceder al beneficio, explicó que la idea es que se acerquen a la empresa de transporte y adquieran la cantidad de boletos que necesitan con el tope que fija la ley.
El boleto será intransferible y no podrá ser usado como pasaporte gratuito para trasladarse a otro lugar que no sea el establecimiento educativo, según la reglamentación. En la provincia hay un promedio de 415 mil alumnos. Hoy en día, no todos usan el transporte público, pero seguramente crecerá el uso una vez que sea gratuito.
Comentá la nota