El nuevo Congreso que se pone en marcha hoy estará signado por un virtual “empate” entre las dos coaliciones dominantes del sistema político argentino, el Frente de Todos (FdT) -como sustento del Gobierno- y Juntos por el Cambio (JxC) -como principal referente opositor-. El equilibrio en la representación de ambos espacios abre dudas sobre la gobernabilidad y torna más significativo el rol de las terceras fuerzas, tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado, para la sanción de leyes o el bloqueo de iniciativas. En la Cámara baja, el FdT necesitará del apoyo de 11 diputados para obtener el quorum, mientras que en el Senado deberá atraer al menos a dos legisladores de otros bloques para tratar proyectos que le interesen al Poder Ejecutivo o a la vicepresidenta Cristina Kirchner. Así, la composición del Congreso será distinta a la que esperaba el oficialismo: antes de las elecciones, tenía el objetivo de conseguir el quorum propio en Diputados y, finalmente, lo terminó perdiendo en el Senado. En este contexto, ¿quiénes son los legisladores que pueden inclinar la balanza?

Diputados LA NUEVA COMPOSICIÓN DE LA CÁMARA BAJA

El Frente de Todos necesita 11 aliados para formar quorum. La oposición requeriría 13 para alcanzarlo

En la Cámara baja, el FdT retuvo la primera minoría, lo que abrió la puerta a la continuidad de Sergio Massa al frente del cuerpo, aunque el oficialismo cuenta desde ahora con un bloque de solo 118 diputados y deberá sumar al menos 11 voluntades para reunir el quorum e iniciar las sesiones. A su vez, JxC llega a los 116 diputados propios, aunque divididos en seis subbloques, entre ellos el flamante Evolución Radical, que se apartó de la bancada de la UCR.

 EL INTERBLOQUE MENOS HOSTIL AL GOBIERNO

Con cinco integrantes, el interbloque Provincias Unidas (PU) está presidido por el rionegrino Luis Di Giácomo, que cuenta con experiencia legislativa y viene actuando en sintonía con el oficialismo. El vicepresidente es Diego Sartori, un misionero que fue intendente de la ciudad de Alem y que se encolumna con Carlos Rovira. hombre fuerte de la provincia mesopotámica. A su vez, Rolando Figueroa tendrá un monobloque del MPN, pero estará dentro de PU.

 EL GRUPO QUE TIENE LA LLAVE DEL QUORUM

Son ocho los diputados que se agrupan en el Interbloque Federal. Lo integran tres bonaerenses, entre ellos el debutante Florencio Randazzo; tres cordobeses, que reportan al gobernador Juan Schiaretti (una es Natalia de la Sota, hija del exgobernador José Manuel de la Sota), y dos santafesinos, con la exintendenta de Rosario Mónica Fein a la cabeza. Se trata de una suerte de “tercera vía” y no garantiza apoyo al oficialismo en todos los proyectos.

 LA IZQUIERDA, UN BLOQUE ESQUIVO

Por primera vez en la historia, este sector tendrá cuatro diputados nacionales: se trata de Nicolás del Caño y Romina Del Plá (provincia de Buenos Aires), Myriam Bregman (ciudad de Buenos Aires) y Alejandro Vilca (Jujuy). El interbloque estará compuesto por dos bloques para sumar discursos en el recinto. Suelen dar quorum para sesionar, pero no acompañan ningún proyecto de otras bancadas.

 LOS LIBERALES, ANTIKIRCHNERISMO A LA DERECHA DE JUNTOS POR EL CAMBIO

La Cámara baja contará desde hoy con dos bloques autodenominados liberales. Por un lado, se ubicarán los porteños Javier Milei y Victoria Villarruel (La Libertad Avanza) y, por otro, los bonaerenses José Luis Espert y Carolina Píparo (Avanza Libertad). Milei explicó que no estarán juntos porque Espert es un “liberal clásico” y él, en cambio, un “minarquista”: cree que el Estado solo debe ocuparse de la justicia y la seguridad. Estarán más cerca de JxC.

 LOS DIPUTADOS “SUELTOS”

El santacruceño Claudio Vidal y el riojano Felipe Álvarez conformaron el bloque Juntos Somos Energía. Se trata de una unión que podría llegar a incidir en las votaciones más ajustadas. Vidal proviene del poderoso sindicato de petroleros de Santa Cruz y tiene aspiraciones de competir por la gobernación en 2023, mientras que Álvarez es un peronista no kirchnerista que llegó al Congreso por JxC, pero que ya dio muestras de relativa independencia de criterio.

 Senadores LA NUEVA COMPOSICIÓN DE LA CÁMARA ALTA

El Frente de Todos necesita 2 aliados para formar quorum. La oposición tendría que sumar a 4 legisladores para alcanzarlo.

La vicepresidenta ya no tiene bajo su control a la mayoría con la que el FdT sancionó todas las leyes en los últimos dos años. Al Senado ingresaron 14 nuevos representantes de JxC contra solo 9 del FdT y un independiente. La forma en que se renueva un tercio del cuerpo -24 sobre 72- refleja cabalmente el resultado de las recientes elecciones legislativas, donde la principal coalición opositora ganó en 13 de los 24 distritos del país.

 LOS ALIADOS MÁS PROBABLES DEL GOBIERNO

Para iniciar las sesiones, el bloque oficialista buscará el apoyo de Alberto Weretilneck (Juntos Somos Río Negro) y de Magdalena Solari Quintana (Frente de la Concordia Misionera), con quienes llegaría al “número mágico” de 37, requerido para formar el quorum. Weretilneck es el líder de la fuerza provincial que gobierna Río Negro y un aliado del FdT en el Senado. Solari Quintana fue concejal de Posadas y seguidora del exgobernador y senador Maurice Closs.

 LOS MÁS CERCANOS A JUNTOS POR EL CAMBIO

El salteño Juan Carlos Romero (exgobernador de la provincia) y la neuquina Lucila Crexell (MPN) anunciaron ayer, después de intensas negociaciones, que formarán parte del interbloque de JxC, lo que elevará a 33 el número de opositores antikrichneristas. En tanto, la riojana María Clara Vega optó por permanecer fuera de esa estructura, molesta con el armado electoral de Patricia Bullrich (Pro) y del radicalismo en la provincia norteña.

PERONISTA EQUIDISTANTE ENTRE EL GOBIERNO Y LA OPOSICIÓN

Alejandra Vigo es la representante de Córdoba Federal, un monobloque cuyo posicionamiento será clave para la formación de mayorías en el Senado, aunque la mujer del gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, anticipó que buscará tener un rol equidistante. La fuerza que gobierna la provincia mediterránea recupera así un lugar en la Cámara alta, luego de que Carlos Caserio rompiera con Schiaretti y se sumara al Frente de Todos en 2019.