Varios diputados presentarán su queja esta tarde durante la sesión, por lo que consideran una "falta de respeto ya que no nos respetan los cupos que tenemos los bloques más chicos para incluir nuestros proyectos en el Acta de Labor Parlamentaria", tal como lo expresó Virginia Cornejo, presidenta del bloque del PPS.
A principio del año legislativo, los diputados realizan una planilla en la que contemplan todas las sesiones que habrá durante el año y planifican la cantidad de proyectos que se tratarán en cada encuentro.
Una vez obtenido dicho cálculo se distribuyen esos cupos proporcionalmente a la cantidad de legisladores que tiene cada bloque, por lo que el justicialismo es favorecido en virtud de tener una amplia mayoría, mientras que los bloques unipersonales como los del Partido Obrero o Identidad Renovadora, deben administrar cuidadosamente los turnos que reciben.
"Hasta ahí estamos todos de acuerdo, pero el problema comienza cuando el oficialismo empieza a pasar por encima de los cupos y a cajonear nuestros proyectos imponiendo su mayoría en las comisiones y dejando sin dictamen nuestras iniciativas, lo que evita que el proyecto pueda subir a debate, ya que si lo hace en esa condición es casi seguro que sea rechazado, salvo que se haya consensuado antes, de esta manera perdemos nuestros cupos, y no se los reprograma", explicó Cornejo.
"Desde que empezó el año todavía no conseguimos que nos aprueben un solo proyecto de Ley de nuestro bloque, el Frente Democrático, porque siempre el PJ se encargó de frenarlos en las comisiones", señaló Bernad.
Durante la sesión pasada hubo quejas al respecto del Partido Conservador Popular y de Identidad Renovadora, porque ambos tenían cupo para la sesión del 11 de septiembre que finalmente no se hizo por el Milagro, y reclamaron que se les reprograme ese lugar perdido en futuras sesiones.
Igualmente Irene Soler del PCP, sostuvo que "hasta lo que yo sé salvo ese hecho puntual nosotros no tuvimos mayores inconvenientes con el tema cupos y hasta ahora se nos respetaron tal como estaban diagramados".
Por otro lado trascendió que este enojo no sería patrimonio exclusivo de los opositores, sino que dentro de los bloques oficialistas también hubo malestar al respecto con el justicialismo por ese tema y que inclusive desembocó en la amenaza de formar un interbloque entre el Partido de la Victoria, el Frente Plural y el Partido Renovador, algo que finalmente no prosperó.
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