El pedido para que el intendente Horacio “Pechi” Quiroga ordene la realización de una auditoría a la empresa de transporte Indalo a través de la Universidad Nacional del Comahue (UNCo) ya partió hacia el Ejecutivo Municipal.

Ayer los concejales aprobaron por unanimidad, en la tercera sesión ordinaria del año, un proyecto de comunicación para avanzar cuanto antes en este trabajo. Este estudio será para la mayoría de los ediles una condición indispensable para aprobar o rechazar el aumento del boleto que se solicitó en las últimas semanas de 2014. 

En el mismo encuentro legislativo, pero por 13 votos contra uno del oficialismo, se ratificó en todos sus términos la ordenanza vetada por Quiroga en diciembre del año pasado y que ponía fin al contrato del Municipio con la Cámara Argentina de Talleres de Revisión Técnica (Cataret) en el negocio de las verificaciones técnicas obligatorias vehiculares.

Si bien la comunicación por Indalo tuvo el aval de todos, los concejales de la oposición aprovecharon el momento para criticar con dureza al sistema de transporte y al Municipio por no tomar decisiones concretas que den una solución a los problemas que está viviendo este servicio público.

Los paros que sufrió en los últimos meses la empresa y su consecuente paralización sorpresiva del servicio, y el real cumplimiento del contrato de concesión se marcaron como preocupaciones en el recinto. También se mencionó que si la auditoría tiene resultados negativos, “no hay que tenerle miedo a la caducidad del contrato”.

Críticas

“No le propongo ir a la Corte Internacional de la Haya porque no creo que nos den audiencias, pero sí a la Universidad Nacional del Comahue. Tiene que haber una mesa seria que termine con todos estos enfrentamientos políticos”, dijo el concejal del MPN, Juan Pablo Prezzoli, en respuesta a las declaraciones públicas de Quiroga, quien había ironizado sobre la auditoría días atrás.

También corrigió al intendente: “No sé quién le hace los números a Quiroga, pero en marzo de 2012 el boleto estaba 2,41 pesos, y hoy está 4,90 pesos. Esto no es un 27 por ciento como él dice”.

“Esta auditoría va a ser importante a los efectos de certificar los incumplimientos de la empresa concesionaria para dar el marco al efectivo mejoramiento del sistema o la posibilidad, cada día más concreta, de decidir la caducidad del contrato”, agregó en el recinto el concejal Gastón Contardi, de la UCR.

Minutos antes de este debate, los ediles ratificaron la rescisión del contrato con Cataret. Con esta decisión, el intendente deberá terminar la relación contractual con esta Cámara, y en la ciudad podrán seguir conviviendo las verificadoras que existen, pero las obleas tendrán que seguir emitiéndose a través de la Universidad del Comahue.

“Hemos trabajado durante muchos meses para torcerle el brazo a Quiroga y hacerle entender que es más importante el bienestar general que el suyo propio y del empresario cordobés”, dijo Prezzoli.

Respaldo unánime

Aprobaron la regularización de las tierras de Colonia Nueva Esperanza

En un acuerdo por unanimidad, los concejales habilitaron ayer el camino para la regularización dominial de las tierras de 105 familias de Colonia Nueva Esperanza que desde hace más de 20 años habitan y trabajan en el barrio. Se trata de la segunda etapa de regularización, y se trabajó en conjunto entre los vecinos y los ediles. Si bien no hubo mayores discusiones y ningún concejal dudó que las tierras corresponden a esas 105 familias, desde el oficialismo se planteó vender los lotes a valor de fomento pero a precios actuales. La propuesta tuvo el total rechazo del resto de los bloques, quienes plantearon venderlas a los precios de 2009, cundo se regularizó la primera etapa. “Luego de 25 años, estamos haciendo una reparación histórica con los vecinos. Ellos actualmente no cuentan con servicio de agua y gas, las condiciones de vida no son las mejores y es nuestra responsabilidad legislar para dar igualdad de oportunidades a todos los vecinos de la ciudad”, resumió Osvaldo Llancafilo (MPN).