En un «paper» al que tuvo acceso LANUEVACOMUNA.COM, los candidatos de Cambiemos ya tienen un programa de gobierno para Necochea. El documento claramente no es un plataforma política ni tiene esa intención, sino más bien es el esbozo de un plan de negocios.

El programa fue elaborado hace más de un año y está en el escritorio de los altos dirigentes de la UATRE. En los audios viralizados por estos días, se menciona al «PROYECTO TODO NECOCHEA«, un plan que lleva el sello indiscutido de conocidos profesionales de esta ciudad vinculados al gremio de la UATRE. En una sección del documento, se da por descontado la «inviabilidad» de apoyo por parte del futuro gobierno nacional o provincial «si el signo político es diferente al de Cambiemos».

¿Por qué estos sectores de Cambiemos están tan interesados en acceder a la intendencia de Necochea? ¿Por qué un sindicato a nivel nacional, la Unión Argentina de Trabajadores Rurales, la UATRE está obsesionada con retener y avanzar sobre los sectores de poder del distrito, invirtiendo para eso millones y millones de pesos?

La política es el medio, pero el fin son los negocios. Según esta visión, la Municipalidad de Necochea deja de ser el «estado municipal» para ser una «unidad de negocios». En un rápido punteo de los ítems, sobresalen algunas cuestiones llamativas: para facilitar el desarrollo de los negocios (ambiciosos, por cierto) se subordina cualquier decisión política o administrativa o incluso de las personas que lo llevarán adelante.

El Plan de negocios

Entre las ideas se observa un marcado interés por la urbanización y desarrollo inmobiliario del Parque Miguel Lillo. Sería por etapas, incluso con números y mediciones detalladas. El antecedente del interés sobre este tema fue hace cinco años atrás cuando se impulso la inicitativa del EMPAR, un ente municipal que se crearía para «intervenir» en el Parque Miguel Lillo. La idea fue motorizada entonces por el ex candidato a intendente de Cambiemos, Pablo Aued. Por aquel año 2014, Aued y Rojas estaban preparando el terreno para financiar su eventual gestión de gobierno al año siguiente, con recursos frescos proveniente del fabuloso negocio inmobiliario que significaría.

El Puerto también está incluido en el plan: para la UATRE, es clave la continuidad del control político del Consorcio de Gestión. Es así que se menciona la extensión del área de influencia portuaria a ambas márgenes del río y de otros sectores de la ciudad, para garantizar el «control total de los accesos a la estación portuaria», así como la privatización de sectores (con acceso restringido incluso a las fuerzas de seguridad oficiales) tal como ocurre en otros puertos.

Pagar por los servicios

En el programa se señala claramente que los números de la Municipalidad «tienen que cerrar sin déficit o con el menos posible». A tal fin, «se impone tomar todas las medidas necesarias para que el municipio se encamine hacia el autofinanciamiento» y no genere obligaciones con terceros. En el texto se percibe que se da por sentada una futura relación áspera del municipio con la Nación y la Provincia. Se deduce luego que el peso del financiamiento será de los contribuyentes urbanos y del comercio local con contribuciones de títulos escandalosos. «Estado mínimo» señala el mismo párrafo.

Con eufemismos, se da a entender que se realizarán privatizaciones de servicios que actualmente presta la comuna. Se prevé la «declaración de emergencia sanitaria para el cobro arancelamiento de la atención en hospitales y unidades sanitarias». La provisión de farmacología e insumos hospitalarios tiene nombre y apellido: es para una conocida droguería que trabaja con la Obra Social OSPRERA.

También se menciona que «en el ámbito urbano se avanzará hacia la privatización del servicio de agua» y cloacas (se menciona conversaciones avanzadas con empresas privadas, con colocación de medidores generalizados).

«Es inevitable un importante  armonización (aumento) de las tasas municipales urbanas y del comercio local, así como la exención de tasas para el ámbito rural para el «fomento de la producción».

Llama la atención uno de los ítems donde se menciona expresamente la contratación de un servicio de seguridad privada operativo en determinadas áreas. La empresa se menciona como propiedad de altos dirigentes sindicales.

Despidos de trabajadores municipales

Otro de los puntos que seguramente causará irritación es el referente a la planta de empleados municipales. Con el mismo criterio de autosustentabilidad de las cuentas municipales, el ajuste será regla en un eventual gobierno de los seguidores de la UATRE.

Según el documento, el grupo político calcula que «será necesario contar con el ingreso al municipio de 400 a 600 empleados afines a nuestro sector, para lo cual se deberán optar por métodos estrictos de selección del personal al que se le cancelarán los contratos de trabajo«. Es decir que con la excusa de la «reubicación» del personal y del «necesario ajuste», se va a alterar profundamente la situación de los trabajadores municipales. Según versiones extraoficiales, se reverían las contratados de los últimos dos años así como la totalidad de los destajistas y cooperativistas con la intención de permitir el ingreso de esos nuevos «400 a 600 empleados afines».

En el «paper» se dice sin ambages: habrá despidos para que ingresen los nuevos porque el objetivo es «garantizar la gobernabilidad en el ámbito local». «Cambiemos podría dar por finalizada la situación de los destajistas así como los empleados de planta transitoria ingresados en los últimos dos años a esta parte» dice en una sección del texto.

El Casino, negocio de privados

«Poner en valor» y «patrimonio» son dos de las expresiones que aparecen en la proclama. Es que el objetivo siempre fue controlar la Sala de Juego del Casino. Será por medio de «la puesta en valor del área para su posterior puesta a consideración de inversiones privadas«. Se habla también del traslado de la sala de juego a otro edificio, «en lo posible nuestro», aludiéndose al Hotel Marino, adquirido y en refacciones desde hace un tiempo por la UATRE.

El juego, tal como ocurre en muchos lugares en el mundo, es una actividad ideal para el lavado de activos financieros de los que no se puede fundamentar la procedencia.

Vienen tiempos difíciles para Necochea y los necochenses. O no.