Atrás quedaron las Paso y el análisis de los resultados. Hoy, las seis fuerzas que superaron el piso de 1,5% de votos válidos que la ley exige para poder competir en las elecciones generales saben que tienen 60 días para diseñar la estrategia que les permita consolidar los votos obtenidos y captar los de aquellos que eligieron candidatos en agosto y ya no estarán en el cuarto oscuro en octubre.
Y hay un margen importante: entre los votos en blanco y los que fueron a candidatos que no competirán en la general suman 44.214 votos, lo que representa cerca de 12 puntos. Nada despreciable.
Tras una campaña de poca exposición, Vilma Baragiola mantiene el bajísimo perfil. Este año no hubo debates televisivos, al menos en las Paso. Solo el programa de Canal 10 en el que iban algunos candidatos, mezclados con concejales o dirigentes. El formato “Intratables”, pero con las características domésticas. A ese programa, la candidata de Cambiemos fue con la condición de una entrevista mano a mano, no intercambió palabra alguna con ningún adversario o dirigente de otro partido. ¿Con 40 puntos, bastante más de lo esperado, por qué habría de cambiar la estrategia de cara a la general? La respuesta es –salvo una catástrofe- por nada.
La exfuncionaria mantendrá la misma estrategia: buscará pegarse lo máximo posible a la figura de la gobernadora María Eugenia Vidal, la dirigente con mejor imagen del país, y despegarse todo lo que pueda del intendente Carlos Arroyo, uno de los peor valorado entre los 135 jefes comunales.
La gran pregunta es cuál es el margen que tiene Baragiola para crecer. En buena parte, sin duda, dependerá de lo que le traccionen las listas de senadores y diputados nacionales: si Bullrich y Ocaña crecen en Mar del Plata, Vilma crecerá. “No te olvides que Vidal sacó 52 puntos en Mar del Plata en las últimas elecciones”, advierten algunos operadores de Cambiemos que se esperanzan con alcanzar los 45 puntos en octubre. Otros, en cambio, no son tan optimistas: “Podremos robar algún punto, pero no demasiados. Hay más chances de que el kirchnerismo crezca en Mar del Plata”.
Marcos Gutiérrez, candidato de Unidad Ciudadana, se consolidó en el segundo lugar de las Paso: muy lejos de Baragiola con 20 puntos, pero también muy lejos de Ariel Ciano (1País) que no alcanzó el 12%. Al igual, que Baragiola, sus posibilidades de subir dependerán de la suerte de Cristina Kirchner. Si ella sube, él sube, aunque siempre en menor proporción.
En este mes, el kirchnerismo de Mar del Plata buscará reducir el corte, pues fue el actual concejal el más castigado de todos en ese rubro. Y además iniciarán la caza de votos de sectores progresistas y peronistas que se quedaron sin representación para octubre: Patria Grande, Mar del Plata Puerto y Región o Nuevo Socialismo Marplatense, por citar algunos.
Dirigentes de esos varios de esos sectores fueron destratados por los armadores de Unidad Ciudadana, bajo el mando de Fernanda Raverta, por lo que habrá que ver si pesa más la afinidad ideológica o el enojo coyuntural a la hora de meter el sobre en la urna.
Otro caso particular es el de Juan Rey. Si bien fue precandidato por Acción Marplatense y tiene derecho a incorporarse a la lista que encabezará Marcelo Artime (ya llegaremos a ese caso), el librero y fundador de la ONG Hazmerreír tiene un fuerte afincamiento ideológico con el kirchnerismo, por lo que desde Unidad Ciudadana creen que buena parte de los votantes de Rey podrían elegir por Gutiérrez en octubre.
“Hubo mucha gente que en las Paso votó por otras opciones, pero que en octubre nos va a dar su voto, porque saben que es la única manera de ponerle un freno a Macri”, repiten.
Así como Gutiérrez se acomodó en el segundo lugar, Ciano en el tercero, porque superó por bastante margen (más de lo que muchos esperaban) a la interna de Acción Marplatense que no llegó al 9% de los votos. En cuanto a la ubicación en 1País están satisfechos, aunque reconocen que esperaban una mejor elección de Sergio Massa y, por ende, de la fórmula local.
¿El líder del Frente Renovador sostendrá los 14 puntos que obtuvo en Mar del Plata o profundizará su desaparición en manos de la polarización entre Cambiemos y el kirchnerismo? Los responsables de la campaña local saben que eso no depende de lo que hagan aquí y solo atinan a celebrar que “prácticamente” no tuvieron corte en el ámbito local.
En Acción Marplatense, el ganador con lo justo, Marcelo Artime, hasta ahora solo se dedicó a enviar gestos públicos hacia Juan Rey, a quien durante la campaña para las Paso se encargó de destrozar. “Lo esperamos con los brazos abiertos”, escribió el exfuncionario pultista en las redes sociales.
“Hasta ahora con nosotros no hubo ningún tipo de acercamiento. Hacen todo para la prensa, pero no hubo ninguna reunión formal para charlar”, cuentan desde la vereda de enfrente. Algunos hablan de un café entre Artime y Santiago Bonifatti, pero ninguno de los protagonistas confirma el encuentro. Por lo tanto, si existió y ninguno quiere oficializarlo, permite inferir que no fue demasiado constructivo.
La interna, pareja, le dio un condimento especial al partido vecinal. A Rey le corresponde incorporarse en el tercer lugar de la lista y desplazar así a Francisco Morea, el rector de la Universidad Nacional de Mar del Plata que llevó al Socialismo a una alianza con Acción Marplatense. Dentro de un partido con tanta historia, con el diario del lunes, más de uno le recrimine a Morea la decisión.
Lo concreto es que no se sabe si el sector de Rey se incorporará a la lista que competirá en octubre y, si ocurre eso, Morea seguirá en el armado. Con el correr de las horas seguramente habrá definiciones. Y una vez resueltos esos temas llegará tiempo de que el exintendente Gustavo Pulti, como líder del espacio, analice lo importante: cómo hacer para que AM gane bancas en el próximo Concejo Deliberante.
Los resultados de las Paso dejaron al partido que gobernó durante los últimos 8 años el partido de General Pueyrredon al filo del piso requerido para meter concejales. En una elección tan nacionalizada parece difícil que encuentre argumentos para que marplatenses que no los eligieron en agosto los elijan en octubre. “Y encima hubo muchos que votaron en esa interna solo para joderlo a Gustavo, así que hay votos que no los va a tener”, dicen algunos con algo de malicia.
En la primera experiencia electoral de Cumplir, Fernando Maraude se adjudicó la interna, ante José “Pepe” San Martín y Alejandro Balsano. La meta de cara a octubre será convencer al electorado peronista y filokirchnerista que acompañó al randazzismo en agosto que repetir el voto en octubre no es tirarlo en saco roto.
Alejandro Martínez, el referente local del FIT, deberá multiplicar sus votos para que la izquierda deje de tener representación en las calles de la ciudad y pegue el salto al Concejo Deliberante. No es tarea sencilla, pero en otras esferas ya lograron representación por lo que en algún momento logrará los acuerdos necesarios para acceder a una banca en el cuerpo legislativo.
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