“La actividad comenzará dos días antes de la competición, para pulir todos los detalles de la organización y logística, y terminaremos el lunes siguiente a la clausura, a los efectos de cuidar de que todo se desarrolle sin ningún tipo de inconvenientes desde el punto de vista sanitario”, confirmó el ministro de Salud, Gastón Hissa.

El funcionario resaltó que “la premisa es velar por la prevención y tener todos los recursos listos para brindar la asistencia que sea necesaria, tanto para la importante cantidad de público que convoca este evento internacional, como para los atletas, los organizadores y todas las personas afectadas a su concreción”.

Hissa indicó que “si bien todas las ediciones anteriores resultaron ser verdaderas fiestas de esta disciplina, cada año se ha ido sumando mucha experiencia, a tal punto que los organizadores locales han sido reconocidos por los expertos internacionales, y el equipo de salud siempre ha estado a la altura de la circunstancias, sin que vulnerar en lo más mínimo la atención cotidiana de hospitales y centros de salud”.

Por su parte, el jefe del Programa Medicina del Interior, Eduardo Canteros, encargado del operativo sanitario, destacó que “el objetivo en esta cobertura, como en todo evento público, es adoptar las medidas preventivas y de control para enfrentar cualquier situación de emergencia y/o urgencia individual o masiva que pudiere suscitarse. Para ello hemos trabajado con el ministro Hissa y el equipo de Salud en la articulación de las redes de servicios para la atención de personas en situación de emergencia o urgencia, trabajando además en conjunto con otros organismos para poder actuar en consecuencia”.

El funcionario añadió que entre las medidas dispuestas “implementamos un sistema de vigilancia epidemiológica para identificar oportunamente cualquier cambio inusual en la notificación de enfermedades u otros eventos; también establecimos el alerta correspondiente según los riesgos identificados localmente; coordinamos los sistemas de comunicaciones sectorial e interinstitucional con áreas de Fiscalización Provincial y bromatología municipales, e instalamos una sala de coyuntura epidemiológica, para el registro de todo evento medible con la finalidad de adoptar las medidas sanitarias acordes al suceso”.

En lo que a la fiscalización bromatológica se refiere, “se prevé realizar controles de alimentos y bebidas, como también el consumo de agua segura y la correcta disposición de residuos líquidos y sólidos. Esta tarea implicarán análisis del agua para consumo y control bromatológico y de prácticas para la manipulación de alimentos en hoteles”.

Con respecto a la cobertura asistencial, “los objetivos apuntan a resolver in situ las urgencias médicas de escasa y media complejidad, la estabilización y transporte asistido en casos de mayor gravedad”.

Para la atención en las 7 etapas en que se divide el desarrollo del tour, se han dispuesto tres ambulancias, la instalación de un puesto sanitario transitorio al final de cada etapa, una unidad móvil de control de antidoping, también al cumplirse cada fase. Se cuenta con una unidad de médico radio-tour, para la clasificación y derivación por complejidad, y se dispondrá un alerta en los hospitales de las distintas localidades por donde transcurran las etapas”.

Del operativo participarán el jefe del Operativo Epidemiológico, Cristian Cano, el jefe del Operativo de Fiscalización y Control Bromatológico, Gustavo Quiroga, y un cuerpo de trabajadores del equipo de la salud pública.