Frois había sido suspendido en sus funciones en marzo de 2009 y sometido a jury. El impulsor de la acusación fue el procurador de la Corte provincial, Agustín Bassó, quien fundamentó su petición en un informe de la Cámara de Apelaciones en lo Penal, que auditó los fallos del magistrado suspendido en el período mencionado.

La auditoría había detectado 306 casos en los que no se cumplieron los plazos legales para decidir y errores de tramitación en otros 287 expedientes.

Frois enfrentó el jury con el asesoramiento del ex canciller Rafael Bielsa, que presentó apenas iniciado el proceso un escrito en el que denunciaba la "enemistad manifiesta" del procurador de la Corte con el juez.

Bielsa defendió a Frois con el argumento de que, en 18 años en el Poder Judicial como juez de sentencia, el magistrado firmó 2.500 sentencias y que apenas el 10 por ciento de ellas fueron observadas por los tribunales superiores. De todas formas, los integrantes del Jurado acordaron destituir a Frois, aunque la defensa podrá interponer un recurso ante la Corte.