¿La crisis por falta de gobierno institucional en Bolivia, puede perjudicar el envío de gas importado que entre otras cosas abastece a las Estaciones de Servicio de las provincias del norte argentino?; ¿Si por un lapso limitado de tiempo hasta que se forme una nueva estructura de autoridades del Estado tras la renuncia del régimen de Evo Morales no existen funcionarios que autoricen las operaciones con Argentina qué puede suceder con la importación de Gas?

Los referentes de las Estaciones de Servicio de GNC salieron a despejar dudas sobre posibles consecuencias respecto de la disponibilidad de gas para las regiones que se alimentan del producto importado del país andino.

“Por el momento no tenemos información y no consideramos que haya modificación alguna en la operatoria del envío del fluido desde Bolivia a la Argentina, por el simple hecho de que los compromisos internacionales no se interrumpen a pesar de los conflictos internos de los países”, explicó el Vicepresidente de la Cámara de Expendedores de GNC, Pedro González.

Además dijo que “las importaciones funcionan a través de los operadores, que no necesitan una orden del gobierno para activar la venta de gas, porque en la industria de este suministro participan un gran porcentaje de compañías privadas como Repsol, Petrobras y otras empresas que actúan con los acuerdos previos en materia de regalías e impuestos”.

Los interrogantes surgieron tras el comunicado de Yacimiento Petrolíferos Bolivianos que advirtió a sus clientes, entre ellos, IESA (Integración Energética de Argentina), que la empresa está «impedida de cumplir sus obligaciones» respecto de la provisión de gas rumbo a Argentina.

A través de una carta, la empresa explicó que un grupo de manifestantes tomó las instalaciones de Campo Carrasco y de las estaciones de bombeo cercanas desde donde se envía el suministro hacia nuestro país.