Si hay un reclamo que el sector ganadero lo tiene muy en claro es la falta de políticas a largo plazo que contribuyan a lograr la expansión de la ganadería tanto en Salta como en el resto de las provincias.

Salta hoy cuenta con un limitado número de cabezas vacunas que le impiden autoabastecerse y lograr de ese modo alcanzar un mercado local sólido. No obstante, muchos productores de la provincia están conformes con los avances en genética que se logró aplicar durante los últimos años, aunque consideran que las limitaciones al desarrollo ganadero traerán perjuicios en un futuro cercano. El panorama local de este sector productivo quedó en claro ayer en la Expo Rural que cierra hoy.

“La ganadería en Salta tiene hoy un muy buen nivel y una calidad que se encuentra dentro de las mejores del país”, explicó a El Tribuno Carlos Segón, un prestigioso asesor ganadero. Sin embargo, sostuvo que “la falta de ganado impide que Salta se pueda abastecer. No hay más cabezas de ganado vacuno porque se paró el crecimiento de la frontera agropecuaria. Muchos ganaderos no se pueden extender por la falta de habilitación de los permisos para los campos e inclusive por la ley Bonasso”. Segón consideró que “Salta desde hace unos años se encuentra estancada en cuanto al nivel de producción. Hay cerca de 1 millón de cabezas, y deberíamos tener ya alrededor de 2 millones”. Con la prohibición de los desmontes quedó reducido el margen de hectáreas disponibles para extender la ganadería, sobre todo en los departamentos del norte salteño como Rivadavia, San Martín, Santa Victoria Oeste, donde no se pudo introducir pasturas.

“Tenemos que autoabastecernos, pero ello no es posible sin una extensión de la producción. Podemos producir 4 millones de cabezas en un plazo de entre 8 y 10 años. Los productores salteños saben que lograr esto sería un anhelo importante”, señaló José Alberto Llorente, consignatario de hacienda. Llorente aclaró que “tanto la Nación como la Provincia tienen que diseñar planes crediticios que apunten a lograr un crecimiento y desarrollo ganadero a largo plazo, que le permita al productor poder invertir en aguadas, alambrados y mejora de pasturas”.

Consumo local

En Salta la producción no logra abastecer a los consumidores; lo mismo ocurre en las provincias vecinas de Jujuy y Tucumán. Entre estas 3 provincias la cantidad de carne que importan otras regiones argentinas alcanza los $400 millones de dólares.

“Nosotros estamos situados en un lugar estratégico: tenemos más espacios que las provincias vecinas para extender la ganadería e, inclusive, tenemos las condiciones naturales más propicias para hacerlo. No es imposible poder autoabastecernos y llegar a aquellas provincias”.