El mercado argentino ha presentado una disminución notable en el consumo de productos de Coca-Cola Femsa y Arca Continental. En el segundo trimestre del año, Arca Continental reportó una disminución del 21% en el volumen de ventas en Argentina. Arturo Gutiérrez, CEO de Arca Continental, señaló que aunque la caída fue menor en comparación con el primer trimestre, sigue siendo un desafío considerable. Por su parte, Ian Craig, CEO de Coca-Cola Femsa, destacó una contracción del 31% en el ingreso disponible, lo que resultó en una disminución del 9.9% en el volumen de ventas.

 

La fuerte depreciación del peso argentino ha sido uno de los factores clave que han impactado negativamente en el consumo. La inflación alta y persistente, junto con una menor demanda debido a las bajas temperaturas, ha contribuido a la caída en el volumen de ventas. Además, la incertidumbre económica ha generado un ambiente de cautela entre los consumidores, quienes han reducido su gasto en productos no esenciales.

A pesar de los desafíos actuales, tanto Coca-Cola Femsa como Arca Continental mantienen una perspectiva optimista para el futuro. Ambas empresas confían en una recuperación económica en el segundo semestre del año. Arturo Gutiérrez mencionó que la incertidumbre sigue siendo alta, pero que esperan una mejora en la economía, lo que debería traducirse en un aumento en el consumo. Ian Craig agregó que la estabilización de la inflación y una recuperación gradual del ingreso disponible están comenzando a reflejarse en una mayor confianza del consumidor.

Ambos ejecutivos coincidieron en que la crisis actual es temporal y que las medidas gubernamentales están encaminadas en la dirección correcta. Esto les da confianza en que el mercado argentino volverá a crecer el próximo año. Coca-Cola Femsa y Arca Continental están adoptando estrategias diferentes a otros actores del mercado, enfocándose en mantener la calidad y disponibilidad de sus productos, a pesar de los desafíos económicos.

Durante el primer semestre del año, ambas empresas reportaron resultados financieros positivos a nivel global. Arca Continental registró un aumento del 2.5% en sus ingresos, alcanzando los 6,100 millones de dólares, mientras que Coca-Cola Femsa mostró un crecimiento del 12.7%, con ventas de 7,400 millones de dólares. En términos de utilidad, Arca Continental reportó un avance del 8.8%, llegando a 511 millones de dólares, mientras que Coca-Cola Femsa registró una expansión del 18.1% en sus ganancias, superando los 1,000 millones de dólares.

Estos resultados positivos destacan la capacidad de ambas empresas para adaptarse y superar desafíos en otros mercados, a pesar de las dificultades enfrentadas en Argentina. La diversificación geográfica y una sólida estrategia de gestión de costos han sido fundamentales para mantener el crecimiento.

La depreciación de las monedas a nivel regional, especialmente en Brasil y Argentina, ha sido un desafío adicional para Coca-Cola Femsa y Arca Continental. En Ecuador, las nuevas reformas tributarias y la inseguridad han afectado el negocio, pero las iniciativas de reducción de costos han ayudado a mitigar estos impactos. En Uruguay, Coca-Cola reportó una caída del 12.1% en los volúmenes, atribuida a una base de comparación difícil debido a una grave sequía en 2023 que impulsó un crecimiento extraordinario en el consumo de agua personal.

Ambas empresas han implementado estrategias de cobertura para mitigar la volatilidad en los precios de las materias primas. Arca Continental ha cubierto el 80% de sus necesidades de aluminio en México y Estados Unidos para 2024, y ha comenzado a cubrirse para 2025. Coca-Cola Femsa, por su parte, tiene una posición en materia de divisas para 2024 en México y Argentina, cubriendo más del 60% de su exposición a materias primas dolarizadas. Estas medidas son esenciales para garantizar la estabilidad de costos y protegerse contra fluctuaciones en los precios de insumos clave como el azúcar y el aluminio.

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El mercado argentino representa un desafío significativo para Coca-Cola Femsa y Arca Continental, debido a la depreciación del peso, la alta inflación y la disminución del consumo. Sin embargo, ambas empresas mantienen una perspectiva optimista para el futuro, confiando en una recuperación económica en la segunda mitad del año y en el retorno al crecimiento en 2025. La diversificación geográfica y las sólidas estrategias de gestión de costos han permitido a estas empresas superar desafíos en otros mercados, destacando su capacidad de adaptación y resiliencia.