Los años políticos son años de fricción. Momentos en los que suelen aflorar los sentimientos más bajos de los que intentan introducir en la política la idea de que cualquier acción se justifica con tal de conseguir el objetivo que se persigue, por espurio que sea. Le pasó al ex intendente Carlos Erreguerena cuando –un hecho ocurrido un 15 de abril de 2007- aflojaron las tuercas de las ruedas del auto oficial en el que se trasladaba. Hizo la denuncia pero nunca se pudo identificar a los responsables. Le pasó al ex intendente José Enrique Echeverría cuando sabotearon y vaciaron de información varias de las áreas que recibió, aun siendo del mismo partido,  en 2009.  Y hasta el propio ex intendente José Luis Pérez dejó trascender en más de una oportunidad que su gestión había sido blanco de intentos de sabotaje. Ahora, y en este contexto, la gestión de Cambiemos no parece ser la excepción. En la última semana sufrió dos sabotajes que afectaron el principal y único efector de salud que tiene la ciudad y un elemento de vital importancia para mantener limpia la ciudad: la barredora. Este tipo de ataques no sólo afecta el desenvolvimiento de la administración, sino que tiene un impacto directo en los vecinos que utilizan el servicio de salud o bien esperan las prestaciones vinculadas a la higiene urbana. Según información exclusiva a la que accedió La Vanguardia, en las últimas semanas el Hospital se quedó sin agua caliente en medio de un fin de semana con mucha actividad. Esta situación generó malestar entre los pacientes internados, el personal del nosocomio, y los vecinos que asistieron para acompañar a familiares que esperaban por una atención médica. Cuando personal de mantenimiento fue a tratar de identificar la falla la sorpresa fue grande: alguien intencionalmente había cerrado y violentado la llave de paso del agua caliente dejando a todo el centro de salud, incluso el área sensible de cirugía, sólo con agua fría. También se encontró una heladera, que recientemente había sido reparada y que estaba lista para ser colocada en el piso asignado, tirada en el suelo de un galpón externo. “La tiraron para romperla y que no se pueda utilizar”, dijo una fuente consultada por este diario.  

En el obrador. En el ámbito del obrador se detectó el otro atentado que, en este caso, afectó a la barredora. Por este motivo, desde el área de Espacios Públicos se remitió una nota al director de Recursos Humanos, el doctor Gabriel Muñoz, en la que se explica de manera detallada parte de la situación advertida por quienes habitualmente manejan este vehículo. La nota, a la que accedió La Vanguardia, señala que “el día lunes a las 7:30 de la mañana, el mecánico del Obrador Municipal informó que el camión barredor había tenido un desperfecto y que la rotura sería un posible sabotaje. Ante tal manifestación me acerqué –expresa Nicolás Álvarez Quinteros, director de Espacios Públicos-  hasta el taller y procedo a constatar el hecho. Realizando una minuciosa observación de la manguera se observa que el caño de aire de los hidráulicos del cepillo se encuentra literalmente cortado, llegando a la conclusión que el corte ha sido intencional. Me pongo en contacto con el chofer, el cual me informó que había estado trabajando en la máquina hasta el día sábado 4 a las 13, mencionando que la barredora se encontraba en perfectas condiciones. Ante tan desagradable hecho, procedo a sacar fotografías de la rotura, las que se adjuntan al documento y solicito que por su intermedio se inicien las actuaciones de rigor, para que el mismo no quede impune”, dice el escrito.

El intendente furioso.  Tras los incidentes, La Vanguardia consultó al intendente el día viernes quien confirmó los hechos y dijo que irá “hasta las últimas consecuencias”. Visiblemente molesto, Reino dijo que supervisará personalmente la investigación interna para que estos hechos no queden impunes. “No quiero pensar que esto tiene que ver con algo político, pero si hay empleados involucrados seremos muy severos con las sanciones. No estoy dispuesto a soportar este tipo de situaciones”, se extendió.

Indicios. Respecto del análisis que hacen internamente en Cambiemos, muchos creen que los ataques vinieron desde adentro. “Sólo personas con conocimiento de los movimientos y horarios pudieron llegar hasta esos lugares del Hospital y del obrador para consumar los hechos que ahora se denuncian”, indicaron.  

Barredora. El camión barredor es parte de la nueva infraestructura gestionada para mejorar los servicios de limpieza urbana que brinda el municipio. Se trata de un camión Iveco Tector Attack equipado con un equipo barredor y aspirador, el cual fue destinado a los servicios públicos. En aquel momento, el intendente valoró la relación que mantiene con el gobierno de María Eugenia Vidal. “Fue a través de Provincia Leasing que nos ha dado todo su apoyo para adquirir la barredora porque no teníamos capacidad crediticia”, había indicado Reino. Desde su llegada, la barredora tuvo consecutivos inconvenientes técnicos que la mantuvieron parada varias semanas. Ahora en el gobierno se preguntan si esta situación pudo ser provocada también por sabotajes que pudieron ocurrir en ese tiempo.