Dos sectores bien definidos pugnan por acceder a la conducción del centenario partido: Radicales por la Gente impulsa al cafayateño, Miguel Nanni, y Radicales Unidos promueve a Ana María Hernández.

El sector de Nanni denunció el último fin de semana un irregular proceder de la Junta electoral y anoche pidió que se garantice la realización de las internas el 5 de agosto.

Sostiene que la interna “se ha manchado de irregularidades atribuibles a un sector que prefiere sostenerse en cargos partidarios a fuerza de intervenciones y provocando dilaciones en un cronograma que la Junta electoral ya no puede cumplir”.

No dudaron en señalar que una línea nacional de la UCR y algunos extrapartidarios locales “buscan tener influencias que han obtenido con la actual conducción del partido y con la que se sacrificaron en el 2011 expectativas propias a manos de una oferta electoral frentista”.

El sector de Nanni advirtió que las maniobras dilatorias de la Junta ponen en riesgo la concreción de las internas, con lo cual se colocará a la UCR a las puertas de “otra intervención”. De la forma que se está actuando, aseguran, no “se garantiza transparencia para el acto electoral”.

El sector de Nanni enfatizó que para “arrogarse la representación de todos los correligionarios, se debe pasar por el tamiz de los votos” y subrayó que desde el órgano electoral que debe controlar el proceso “se incurrió en irregularidades que encuentran causa en la carencia de imparcialidad y en el hecho de beneficiar a un determinado sector”.

Se señaló el dictado de resoluciones que “adolecen de vicios, como el de imponer que la aceptación de candidaturas las certifique un funcionario público, requisito que no se exige en comicios generales, provinciales o nacionales y, además, se omitió firmar esa resolución y aprobar el reglamento que se pregona vigente”.

A la negativa de suministrar documentación, se marcó el hecho de que “solo pudimos acceder a resoluciones que tuvimos conocimiento, con un escribano público”.

El sector de Nanni asegura que presenta candidatos en 15 departamentos y que pagó los $6.000 exigidos para participar de las internas, “requisitos que no sabemos si la otra lista cumplió; las negligencias marcadas a la Junta no aparecen como casuales sino que lucen producto de una estrategia que busca evitar el triunfo de Nanni”, se concluyó.