Era un encuentro disputado. Ni Gimnasia ni Vélez parecían encontrar la fórmula para doblegar a su rival y meterse en los cuartos de final de la Copa Argentina. Faltaban alrededor de diez minutos y el destino indicaba que todo iba camino a los penales. Pero fue uno solo nada más. Porque Milton Caraglio se metió en el área tratando de llegar a capturar un pase largo y chocó contra el arquero Nicolás Navarro, quien pareció llegar primero a tocar la pelota. Pero el árbitro Pedro Argañaraz juzgó que fue falta y cobró eso.

El propio delantero de Vélez se hizo cargo de la falta y puso el 1-0. Suficiente como para que el Fortín pase a cuartos de la Copa, donde se enfrentará a Lanús el próximo miércoles 9 de septiembre. Cuando el juez pitó el final, Pedro Troglio no pudo contener su enojo y salió disparado a reclamar. Los micrófonos y cámaras captaron esa situación de cerca y se escuchó la frase del técnico con claridad: "Es un delincuente, cobran cualquier cosa, no sirven para nada. Hay que echarlos a los cuatro". 

El técnico del Lobo se fue muy molesto al vestuario. Entre campeonato y Copa, el conjunto de La Plata suma cuatro caídas en sus últimas cinco presentaciones.