Se espera desde ya un pronunciamiento crítico, ya que para los diputados del partido, la pauta de gastos (cifrada en más de 33 mil millones de pesos) es “un dibujo”, los ingresos están sobreestimados y los gastos son excesivos.

El punto donde se concentrará la UCR es el del endeudamiento, ya que, entre viejos empréstitos y nueva deuda, el partido opositor estima que el Gobierno ha pedido a la Legislatura una autorización por más de 4.000 millones de pesos.

Los cálculos radicales indican que en la pauta se piden 1.700 millones de pesos para amortizar deuda (es decir, pagar cuotas de los endeudamientos de años anteriores).

A esto se suman 244 millones de pesos de la Letra que se emitió hace pocos meses, la cual será, al parecer, refinanciada.

Si bien podría existir un margen de tolerancia para la amortización de la deuda, distinta sería la postura respecto de la llamada “deuda nueva”.

Diputados y senadores radicales ya avisaron en una reunión privada que se realizó semanas atrás con el vicegobernador Carlos Ciurca y el presidente de Diputados, Jorge Tanús, que dos pedidos difícilmente pasen el filtro opositor: el endeudamiento para obras y reparaciones por casi 1.000 millones de pesos para Aysam y un préstamos para capitalizar el Fondo de la Transformación y Crecimiento por 400 millones de pesos.

En el mismo sentido, no pasaría tampoco, o al menos se reduciría, el pedido de emisión de Letras por un valor equivalente al 3 por ciento del presupuesto (es decir, cerca de 1.000 millones de pesos más).

Todos estos ítems, sumados, superan con comodidad los 4.000 millones de pesos que la UCR no estaría dispuesta a aprobar.

Malestar. Sin embargo, los radicales esperarán hasta este lunes para definir su planteo político ante el presupuesto. La reunión se hará en el comité en horas de la tarde y en la antesala, los legisladores afirmaron que hay “malestar”.

“Cada vez hay más artículos de superpoderes y se complica el consenso. Hay malestar porque la pauta salarial está afuera del esquema, ya que se reservó el 10 por ciento para los aumentos salariales y eso seguramente no va a alcanzar”, explicó el diputado Roberto Infante.

Por otra parte, los radicales no creen que el gobierno de Francisco Pérez logre cumplir con su expectativa de recaudación en 2014 y al mismo tiempo observan un crecimiento de la deuda flotante o no consolidada, que está cifrada en 800 o 1.000 millones de pesos, según sus cálculos.

“El presupuesto es un dibujo y eso quedó claro con la exposición del ministro de infraestructura. Ni él se lo cree. No van a llegar a un 40 por ciento de la ejecución y el remanente lo van a usar para gasto corriente”, señaló Infante.

También atacó al Gobierno por los gastos en empleo público: “Acá hay una clave: en 6 años entraron 25 mil empleados a la administración, pero no hay más médicos o enfermeros. En 6 años entraron sólo 1748 policías. Esto demuestra que hay un mal gasto”, expresó.

Firmes con la fecha. La semana pasada se realizó en tiempo record la ronda de consultas con ministros y secretarios en las comisiones de Hacienda y Presupuesto de la Legislatura. Este desfile se hizo a las apuradas porque todo quedó demorado por la crisis con la Policía.

Las comisiones dejaron a la vistas diferencias, en algunos casos muy fuertes, entre las pretensiones de las autoridades de algunas áreas y los montos que autorizó Hacienda. Un caso fue la Fiscalía de Estado, cuyo subrogante, Javier Fernández, se quejó de haber sufrido un recorte de unos 30 millones de pesos. También se notó la diferencia de cálculos entre las autoridades del Poder Judicial y el Ejecutivo: el presupuesto de la Justicia tiene cerca de 500 millones de pesos menos que los que en tribunales consideran como mínimo para funcionar.

También se generaron cruces entre sindicalistas y el ministro de Salud, Carlos Díaz Russo.

A pesar de todo esto, el presidente de Diputados ratificó que el presupuesto se tratará en lo posible el miércoles, aunque no hubo detalles sobre la respuesta que dará a diferentes reclamos ni cómo se desarrollará la negociación con la UCR, que reclama ajustes.