Mientras algunos opositores son más permeables al pedido oficialista, otros prefieren bajarle el pulgar al gobernador Alfredo Cornejo.
La previa a la aprobación del Presupuesto en Mendoza, que siempre toma visos de culebrón de intrigas y enredos, esta vez parece no hacer una excepción.
Mientras el oficialismo presentó la pauta en septiembre, esperando que el tratamiento fuera largo –aunque ya se ha extendido más de la cuenta–, la oposición se debate en un mar de contradicciones internas.
Por un lado, los que componen la oposición más dura no quieren darle el sí al endeudamiento que pide el gobernador Alfredo Cornejo, por $4.000 millones. Entre otros motivos, porque cuando fueron gobierno no se les permitió endeudarse y porque consideran que ya se le ha dado a la actual gestión el suficiente permiso para tomar empréstitos, y que otorgarle este nuevo monto es excesivo.
Por otro están los peronistas "dialoguistas" con Cornejo, básicamente el sector de los intendentes y de los legisladores que a él responden. En este grupo se encuentra la conducción del peronismo.
En esta dicotomía se ha movido el PJ durante el fin de semana, y es lo que continuará haciendo hasta mañana inclusive.
Lo que queda claro es que por más que el bloque opositor se haya comprometido la sesión pasada a debatir el Presupuesto 2017 de Mendoza en la sesión de esta semana, la promesa puede quedar trunca. Todo depende de lo que ocurra en las próximas horas. De hecho, el presidente de Diputados, Néstor Parés, lo advirtió "el tratamiento del Presupuesto no está cerrado para este miércoles. Estamos esperando noticias del bloque opositor o de la nueva conducción", aclaró.
La pelea peronista
No es ninguna novedad que después de la derrota del 2015 el peronismo no logra levantar cabeza. Si bien han podido llegar al acuerdo de una nueva conducción, los integrantes del PJ no pueden coordinar una postura en común.
En Diputados, los seguidores de Alejandro Bermejo, Jorge Omar Giménez, Roberto Righi, Martín Aveiro y Omar Félix, quieren dar el sí: aceptar el endeudamiento, "para invertirlo en obra pública que tenga nombre y apellido", según aseguró el intendente de Lavalle y quien asumirá como vicepresidente del partido en diciembre. En esta tesitura se encuentra el cacique comunal de San Rafael, según le dijo a Diario UNO, Emir Félix.
Pero en la Cámara Baja hay varios díscolos y líberos.
Diputados como Jorge Tanús, que le responde a Jorge Giménez, Lucas Ilardo, Patricia Galván (ambos de La Cámpora) y Omar Parisi (dicen que le responde a Carlos Ciurca, pero en la Legislatura toma decisiones autónomas). También podría sumarse a este grupo Gustavo Majstruk, el alvearense separatista que se abrió del bloque del FPV y toma decisiones cercanas a los más "duros".
Por esto, las conversaciones no están cerradas, y este es el motivo del tiempo que el peronismo le ha impuesto al oficialismo para darle una respuesta sobre si permitirán la toma de nueva deuda o por el contrario, la frenarán.
¿Será tratado o no?
Este es el contexto por el que aún no se sabe si mañana se trata o no la pauta. Sin embargo, Parés manifestó: "Estamos esperando noticias del bloque o de la nueva conducción. Ellos tienen diferencias internas que solucionar. De todas maneras, el proyecto ya tiene despacho y estado parlamentario. Es decir, se podría debatir sin problemas. "Ya tuvimos una cortesía legislativa de esperar para que el PJ se sacara las dudas, pero ya es tiempo de debatir", sostuvo Parés.
Los "duros" no olvidan y usan la calculadora
"No hay ningún acuerdo cerrado, queremos más información de cómo se ha ejecutado la deuda ya votada. Si le damos a Cornejo los $4.000 millones que está pidiendo, le habríamos votado hacia fin de este año $27.000 millones en total. Esto, teniendo en cuenta que los radicales no nos dieron ni $800 millones, es una barbaridad", manifestó el diputado y ex intendente de Luján Omar Parisi.
Y agregó: "Si dicen que nosotros éramos desordenados, al menos ellos son tan desordenados como nosotros, porque están pidiendo la misma toma de deuda que el año pasado", subrayó Parisi.
Y dijo que si a él le hubieran dado permiso para obtener financiamiento, habría terminado la casas que no se concluyeron por falta de fondos. Ahora, el gobernador sale a decir que van a hacer lo mismo que hubiera hecho yo, pero con más dinero".
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