"Acá lo que se está jugando no son dos pesos más al salario del trabajador de la educación sino que estamos hablando de inversión en Educación pública y determinadas cuestiones que hacen a la vida democrática", señaló Aguirre en declaraciones a RADIO CIUDAD, a pocas horas de conocerse un duro documento del gremio docente en el que cuestiona la falta de diálogo del Ejecutivo provincial. "Acá hubo represión en esta provincia y esto no se discute. No se puede avalar bajo ningún punto de vista", sostuvo.

"Lo que tenemos claro es que en el Chaco en 2007 se votó un proyecto, más allá de nombres, que traía la posibilidad cierta de que en la provincia nos pusiéramos a tono con las políticas que se estaban llevando adelante a nivel nacional", recordó Aguirre.

"Hasta el hartazgo habíamos advertido sobre algunas cuestiones como la ley de financiamiento educativo, la de educación técnica, el primer gesto político trascendente del ex presidente Kirchner, cuando a horas de asumir, personalmente va a Entre Ríos a poner fin a un paro por tiempo indeterminado que estaban llevando adelante los trabajadores de la Educación de esa provincia", repasó.

"Hoy en el Chaco nos encontramos con que no hay voluntad política en las más altas esferas para resolver los conflictos. Y esto se agrava porque no es solamente con el sector de trabajadores de la Educación. No podemos dejar de ser solidarios con los otros sectores y reconocer que esta misma situación se está viviendo en prácticamente toda la administración central, en el área de Salud, en algunos entes descentralizados", sostuvo.

"Además, a la protesta social, al justo reclamo de los trabajadores, se reprime de la peor manera. Podemos llegar a discutir si existe o no algún protocolo válido para reprimir. Podríamos remitir al protocolo de la ex ministra Garré para actuar en este tipo de situaciones. Pero ni siquiera eso", señaló.

"Hoy con otros sectores sindicales podemos tener muchas diferencias en lo que tiene que ver, por ejemplo, con la caracterización del momento político económico que estamos viviendo. Para algunos compañeros de otros sindicatos estamos igual o peor que en los 90. Para otros no; para otros se invierte cada vez menos, para algunos en cambio se invierte más aunque todavía falte todavía mucho por resolver", observó Aguirre.

"Pero donde no habrá ninguna fisura en el arco gremial es que la protesta, el justo reclamo de los trabajadores, se resuelve en una mesa de negociación y no mediante la represión. No queremos que esto se instale y se convierta en una práctica, ni de este gobernador, ni de ningún otro", sostuvo.

"Por esta semana seguimos dando clases. Entendemos que hay una responsabilidad, en nuestro caso como prestadores de un servicio público esencial como es la Educación, pero ante situaciones de este tipo estamos convencidos de que vamos a tener a los padres entendiendo y apoyando nuestro reclamo. Porque acá lo que se está jugando no son dos pesos más al salario del trabajador de la educación sino que estamos hablando de inversión en Educación pública y determinadas cuestiones que hacen a la vida democrática", señaló.

Aguirre confirmó que el próximo sábado un Congreso provincial de Utre Ctera analizará la situación provincial. "Posiblemente haya compañeros de la conducción nacional de Ctera presentes, y eventualmente estaremos coordinando con otros sectores, con los que en los últimos tiempos no estamos estado transitando juntos las calles, pero en estas circunstancias, si tenemos que hacerlo, lo vamos a hacer sin ninguna duda", aseguró.