El régimen cubano afirmó que no cuenta con envases ni materias primas para la producción de refrescos, como parte de la crisis generalizada que atraviesa el país.

Un reporte del diario El Guerrillero dice que la empresa de refrescos Los Portales carece de materias primas como el azúcar, las latas y las preformas de plástico para garantizar refrescos nacionales en las redes de comercio minorista en CUP e incluso en las tiendas en MLC.

Cimex y Ciego Montero son los destinos principales de la producción de Los Portales, que por la escasez de azúcar ha debido alterar sus fórmulas certificadas, afirmó Deyner Carmona Brito, surpervisor de la línea de producción.

Reconoció que la baja disponibilidad de materia prima los obliga a reducir azúcares y mezclar recetas, lo que aclara las recientes críticas a los refrescos, que según los cubanos "saben a cualquier cosa": "El azúcar es uno de los problemas más graves que tiene la fábrica. Hacemos un volumen considerable de refresco sin azúcar, y claro tratamos de mantener los tradicionales, tukola, lima y naranja, pero es difícil", señaló.

Actualmente la producción está lejos de la del año 2018 cuando la fábrica de Guane tuvo récord histórico de producción con un millón y medio de hectolitros en sus dos líneas de refresco.

Según el rotativo la empresa cuenta con una capacidad de cerca de 10.000 botellas de 1.5 litros y 12.000 de 330 ml en una hora, gracias a una maquinaria moderna que también se ha visto afectada por la falta de piezas de repuesto, explicó el director de la fábrica Mario Venero Bencomo.

Especialmente se han visto afectadas las producciones de litro y medio, la variedad de sabores y el formato en lata.

Bencomo señala que de los 12 sabores que producía la empresa sólo se mantienen tres, cola, naranja y limón, por problemas de financiamiento, pagos y otras cuestiones.

La línea de refresco enlatado también sufrió una disminución del plan a solo 25 millones de unidades, de las cuales ya tienen completadas 18. La fabrica de Guane puede producir 30.000 unidades diarias de refresco, dijo el rotativo.

Agrega que la crisis es tal que la materia prima para hacer los envases son más caras en el país que las que logran importar de Turquía o China.

En junio pasado una cubana compartió en las redes la carta de un conocido restaurant de La Habana donde los precios de las cervezas y los refrescos importados eran menores que de los de producción nacional.

La internauta no entendía cómo "lo local resulta más caro que lo importado", lo que le parece un síntoma de la profunda crisis de la economía cubana.