Solo falta que le pongan nombre. Ahora se viene la discusión por los espacios que, dicho sea de paso, no sobran en el edificio de Estomba y Sarmiento donde funciona el Concejo Deliberante.

Es que, salvo que haya un milagro, la semana que viene quedará formalizado el quiebre del bloque del peronismo oficialista: por un lado los tres nombrados, de íntima relación con Larraburu, y por el otro Mandolesi Burgos, Espina, Villalba, Ghigliani y Serra, de estrechos lazos con Breitenstein, el ministro que debió ser intendente.

Las declaraciones formuladas en diversos medios durante la maañana de hoy por los diferentes protagonistas no permite ni siquiera pensar en la posibilidad de un eventual "arreglo".

Pera dijo por ejemplo que siempre el bloque estuvo "pegado con plasticola" y que los concejales que el lunes a la noche emitieron el comunicado en su contra "son pobres de corazón" (programa "Tal Cual Es").

Matías Italiano, en tanto, afirmó que "Mandolesi Burgos debió haberme informado sobre ese documento por una cuestión de respeto ya que soy el presidente del bloque" (La Nueva.).

En nuestro programa de ratio, por su parte, Soledad Espìna sostuvo que "si Pera quiere irse del bloque que lo haga" (ver crónica ).

En el medio de este "terremoto" político provocado por la caída de la rama, y por sobre todas las cosas, por la muerte de Daiana Herlein, el intendente Gustavo Bevilacqua se mostró dispuesto a concurrir al recinto del Concejo para hablar del tema del arbolado público.

Mañana se aprobará la invitación y entre el lunes y martes de la semana que viene, el jefe comunal cruzará la Plaza Rivadavia para responder las preguntas de los concejales.

También, a partir de esos días, serán cuatro los bloques que estarán bajo el amplio paraguas del peronismo: el que responde al ministro (ex intendente que prefirió irse), el que se encolumna detrás de Feliú y los otros dos que seguirán respondiendo a Larraburu y a Bevilacqua (en este caso en menor medida).