Cayó 21,9% real en mayo. El IVA empeoró su desempeño 28,1% en la comparación interanual. Los ingresos por aportes y contribuciones de la seguridad social bajaron 22,5%
La recaudación tributaria volvió a sufrir un duro golpe en mayo y cayó 21,9% real interanual, si se toma una inflación de 2%, en línea con lo que observaron las consultoras privadas en el último mes. La nueva contracción de los ingresos tributarios fue publicada hoy por Afip y se dio de la mano de la fuerte recesión, en el contexto de la cuarentena. A eso se le sumaron las políticas fiscales del Gobierno que buscaron aliviar la carga impositiva de las empresas durante el aislamiento obligatorio.
El dato permite observar dos fenómenos que reflejan lo ocurrido con la economía local durante la cuarentena. Por un lado, el desplome feroz de la actividad económica, por el que se espera una contracción del PBI en torno al 20%, sólo entre marzo y abril. Los datos publicados ayer por Afip dan cuenta de que esa extraordinaria dinámica continuó en mayo. La recaudación del IVA, indicador clave de los niveles de consumo, cayó 28,1% real e intensificó así el desplome de abril, que había sido de 25,6%.
Por el otro lado, da cuenta del deterioro que sufrirá el balance fiscal operativo durante el 2020. En abril el rojo primario fue de 0,7% del PBI. A las políticas que buscan moderar la contracción de la demanda agregada, por la vía de una inyección de ingresos motorizada a través del IFE y del salario complementario, se le suma la fuerte caída en los ingresos. No sólo porque la recaudación tributaria se mueve siempre a la par del producto, sino porque las medidas de alivio oficial también buscaron aliviar ese impacto recesivo sobre las empresas. En ese sentido, según la Oficina de Presupuesto del Congreso destacó que las medidas de alivio tributario a las empresas anunciadas hasta ahora tendrán un costo fiscal de 0,3% del PBI.
Eso se reflejó en la baja de 22,5% real en los ingresos por aportes y contribuciones de la seguridad social. El informe publicado por Afip destacó en ese sentido: "La recaudación vinculada al mercado de trabajo estuvo condicionada por las medidas para amortiguar el impacto económico del aislamiento obligatorio sobre el empleo y los ingresos salariales. Entre las herramientas, en mayo se destacan la prórroga por dos meses del componente SIPA de las contribuciones patronales y la reducción en la alícuota. También incidió en forma negativa el mayor acogimiento a Planes de Facilidades de Pago". Algo de eso se vio también en el IVA, con fuerte acogimiento en el plan de facilidades de pago.
Los derechos de exportaciones cayeron 55,3% interanual real. Bienes personales recaudó $6.791 millones y trepó 1.167% interanual nominal. Ganancias registró una caída de 24% real, también con fuerte impacto de los planes de pago. El impuesto al cheque, otro importante indicador de actividad, que además ayuda a adelantar el número que dejará el IVA en junio, cayó 15,3% real.
Comentá la nota