El jefe de Gobierno tiene como aliados los mandatarios de San Luis, San Juan y Jujuy. Bullrich no aceptó listas legislativas únicas, pero confía que eso no la afectará.
Por Mauricio Cantando
Con el respaldo de Horacio Rodríguez Larreta, el radical Maximiliano Pullaro fue el aspirante más votado en las elecciones primarias de Santa Fe, donde además aventajó por casi 20 puntos a su correligionaria Carolina Losada, respaldada por Patricia Bullrich. El 13 de agosto el duelo santafesino se nacionalizará, porque el posible futuro gobernador electo no podrá ser prescindente de la interna presidencial: su lista de precandidatos a diputados nacionales estará en la boleta del jefe de Gobierno y enfrentará a la nómina que completará la papeleta de la ex ministra de Seguridad.
Situaciones similares se repetirán en San Luis, San Juan y en Jujuy, donde los elegidos para gobernar esas provincias a partir de diciembre subieron a Larreta al escenario de los festejos y, antes o después, armaron con él las listas legislativas. Estas postales abrieron un interrogante en las últimas horas entre los referentes de JxC: ¿Cuánto pueden influir los resultados locales en la interna presidencial?
La exministra confía en que no incidirán, por lo cual se negó a negociar la unidad en las provincias y promovió internas en cada rincón del país, sin importar demasiado el poder local de sus rivales. Bullrich temía traiciones de último momento y decidió ir a todo o nada, parafraseando su slogan de campaña, una decisión que con el golpe que recibió en Santa Fe empezó a encender las alarmas de sus armadores nacionales, quienes hasta este domingo exhibían encuestas favorables y aseguraban que el arrastre nacional pesará más que el empuje de los referentes locales. "Ella no quiso ir a ningún búnker a festejar. Nadie se lo impidió", aclaraban.
Los colaboradores de la candidatura de Larreta tienen otra lectura: señalan que el aporte de su liga de gobernadores puede ser decisivo porque, en definitiva, se trata de una interna, en la que cada voto que se gane "vale doble" y las adhesiones locales se hacen sentir. Recuerdan la incidencia que tuvo la estructura radical en la aplastante victoria de Fernando de la Rúa contra Graciela Fernández Meijide en en la interna de la Alianza, en noviembre de 1998.
Bullrich llegará a las primarias con un poder territorial reducido. Si bien reclutó al comité de la UCR de la provincia de Buenos Aires a cargo de Maximiliano Abad para sumar "fiscalización a bajo costo" en ese distrito, casi no tiene figuras fuertes que la ayuden en el resto del país. Sólo consiguió el respaldo explícito del gobernador de Mendoza, el radical Alfredo Cornejo, a quien antes desafió al elegir a su rival interno Luis Petri como compañero de fórmula.
Los radicales que apoyan a la exministra habían definido para ese lugar a Abad, pero ella se inclinó a último momento por Petri, con quien tiene una buena relación de cuando la ayudaba a imponer sus propuestas de leyes en el Congreso. El gobernador de Corrientes Gustavo Valdés, no quiso participar en la discusión del vice de Bullrich, quien, si se lo pedía, podía considerar la posibilidad de elegir al senador Luis Naidenoff.
Pero ese llamado nunca llegó y tampoco hubo un pronunciamiento de Valdés sobre la interna presidencial. "¿O es un patricista oculto o un larretista en silencio?". bromean en la UCR litoraleña, donde el correntino es líder. Logró lista única de diputados nacionales en su provincia, al igual que otros dos candidatos a gobernador del PRO con chances de ganar: Rogelio Frigerio en Entre Ríos e Ignacio Torres en Chubut. El diputado compite en simultáneo con las primarias y el senador el 30 de julio, cuando Larreta podría subirse a otro escenario triunfal.
Los duelos legislativos
La interna entre Larreta y Bullrich tendrá en agosto su capítulo legislativo, con casi la totalidad de los gobernadores de JxC aliados al jefe de Gobierno. Santa Fe será el mayor desafío para la exministra, porque es la tercera provincia en cantidad de electores y la única en la que jugó una interna local y la perdió por amplia diferencia.
La lista santafesina de Bullrich de candidatos a diputados la encabezará el actual representante de esa Cámara por el PRO José Núñez. Enfrentará a la boleta liderada por Juan Cándido, mano derecha de Pullaro, quien este domingo no tuvo otra opción que anunciar que votaría al jefe de Gobierno. Si hubiera habido una nómina de consenso para la elección legislativa, tal vez esa definición no habría sido necesaria.
Fue lo que intentó en San Luis el gobernador electo Claudio Poggi, presionado por la dirigencia local del PRO, pero no fue posible: Bullrich se negó y armó listas propias para senadores y diputados con dirigentes cercanos al radical Walter Ceballos (aliado de Ernesto Sanz) y peronistas residuales.
En San Juan, donde también se votan representantes para ambas Cámaras, la situación fue similar: Marcelo Orrego, ganador en los comicios a gobernador del 2 de julio, tendrá sus nóminas adosadas a Horacio Rodríguez Larreta. El senador Roberto Basualdo, jefe político de Orrego, intentó negociar la unidad con el operador bullrichista Federico Pinedo, pero no fue posible.
Con figuras del PRO local, en Jujuy Bullrich armó una lista para enfrentar a los radicales que intentan renovar su mandato en el Senado y en Diputados (Mario Fiad y Silvia Giacoppo; y Jorge Rizotti, respectivamente), identificados con el gobernador Gerardo Morales, compañero de fórmula de Larreta.
En Neuquén habrá una historia similar, aunque el gobernador electo, Rolando Figueroa, no es del JxC, sino de un frente electoral propio que surgió de la ruptura del Movimiento Popular Neuquino, el partido que domina la provincia desde hace 60 años. El próximo mandatario tendrá una participación implícita en la interna para diputados nacionales de JxC, porque la lista de Larreta la encabeza Leticia Estévez, dirigente del PRO que se sumó al frente electoral que ganó en la provincia. Bullrich lleva como candidato al actual diputado Francisco Sánchez, tal vez el legislador del PRO que más peleó por un acuerdo con Javier Milei. Hasta se prestó a entrevistas con sus influencers.
En Chaco, el radical Leandro Zdero, ganador de la primaria y posicionado para triunfar en la general, supo jugar a dos puntas, quizá porque pocos confiaban en que JxC sería el frente más votado. Consiguió lista única de candidatos a diputados nacionales. Su padrino político es Valdés, a quien Zdero imitó y hasta ahora se mantiene prescindente en la interna presidencial. Muy pocos pudieron hacerlo.
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