Medio en broma, en Tribunales se dice: "La Justicia es como el túnel del tiempo: sabés cuando entra una causa pero no cuando sale". El dicho puede aplicarse a la sentencia por Cromañón. Es que aunque todas las partes ya adelantaron que apelarán el fallo, se desconoce cuándo la Cámara de Casación Penal se expedirá ya que no tiene plazos. Se estima, eso sí, que a Casación le llevará al menos un año expedirse para que, así, la sentencia finalmente quede firme.

En su sentencia del miércoles, el Tribunal Oral 24 dispuso que hasta que el fallo no esté firme continúen en libertad los 5 condenados a cárcel, entre ellos Omar Chabán (20 años de cárcel), el ex manager de Callejeros Diego Argañaraz y el subcomisario Carlos Díaz (sentenciados ambos a 18 años).

Chabán, de cualquier manera, está intranquilo. "Van a encontrar la forma de cagarme. No puede ser que me hayan condenado a tantos años y me dejen en libertad", le dijo ayer a sus íntimos.

¿Esto es posible? La Sala III de Casación Penal, que es la que interviene en el caso, podría revocar su libertad con el argumento del riesgo de fuga. "Le dieron 20 años de cárcel. Eso representa un potencial riesgo de que se escape", analizó una fuente que conoce a la perfección el ambiente en Casación. Y agregó: "Esta misma sala es la que ordenó que fuera preso. Los jueces sólo lo liberaron cuando se cumplieron más de 2 años de encierro sin que hubiera una condena".

Clarín le preguntó anoche al fiscal del caso, Jorge López Lecube, si iba a solicitar que se detenga a Chabán y a los otros condenados. "Por ahora no tengo previsto plantearlo", contestó.

Mauricio Castro, abogado querellante, sí lo hará. "Pediré la inmediata detención de Chabán, Díaz y las ex funcionarias (Fabiana Fiszbin y Ana María Hernández)", adelantó.

La pregunta del millón es si el pedido podría prosperar. La Sala III está integrada por los camaristas Eduardo Riggi y Angela Ledesma. A Ledesma se la describe como "garantista" y, en esa condición, es totalmente improbable que se incline por ordenar la detención de los condenados hasta que la sentencia no esté firme.

De Riggi, en cambio, se desconoce qué podría decidir. También hay dudas sobre qué haría la camarista Liliana Catucci, quien actualmente se desempeña como presidenta de la Cámara de Casación Penal. Como en la Sala III hay una vacante, a ella le tocará intervenir en el caso.

Esta cuestión, la de que haya una vacante en la sala, también hará que demande mucho tiempo resolver todas las apelaciones "Es una causa complicada y kilométrica y hay muchos imputados y querellantes. Al menos les llevará un año fallar", dijeron las fuentes consultadas.

Una causa del montón se resuelve en más de un año en Casación. Pero en este caso podría jugar a favor la dimensión de la tragedia y sus 193 muertos. "Los camaristas tendrán mucha presión de los padres para resolver rápido", explicaron.

Las defensas de los quince imputados apelarán la sentencia, incluida la de los absueltos Callejeros. ¿La razón? Recurrirán únicamente el punto que los condenó a pagar una indemnización a los padres de Sol Urcullu, una de las víctimas del desastre.

El fiscal López Lecube apelará las absoluciones del ex funcionario Gustavo Torres y de Callejeros: "Para mi está claro que fueron organizadores (del show en Cromañón). Estaba convencido en el momento de mí alegato y lo sigo estando ahora", dijo. El fiscal había pedido que se los condenara a 15 años de cárcel.

Para el año que viene también quedará el comienzo del juicio de Cromañón II. En esa causa hay 4 imputados que no fueron juzgados ahora porque gracias a los recursos que fueron presentando consiguieron ganar sucesivamente más tiempo. Los acusados son Juan Carlos López, ex secretario de Seguridad de la Ciudad; Gabriel Sevald, ex jefe de la comisaría 7ª; Enrique Carelli, ex subsecretario de Seguridad Urbana y Vicente Rizzo, ex director de Servicios de Seguridad Privada.

También Rafael Levy, señalado como dueño de Cromañón, podría entrar en ese juicio. "Levy está acusado de estrago doloso seguido de muerte, el mismo delito que se le imputo a Chabán", contó la abogada querellante Beatriz Campos.

Y explicó que "no importa que en los papeles el dueño de Cromañón sea una sociedad offshore y que, por eso, aún no se haya acreditado quién es su legitimo dueño. En los hechos ya quedó claro que Levy es el propietario".