La estructura del personal de los tribunales piquenses está resentida hasta un nivel de alarma. A las quejas manifestadas el sábado en conferencia de prensa por los dirigentes del Sindicato de Trabajadores Judiciales (Sitraj), por la falta de un adecuado presupuesto para garantizar un correcto funcionamiento, se suman los problemas cotidianos.
Sin personal.
La Sala 5, a cargo de Oscar De Marco, también quedará sin su titular al ampararse el juez al beneficio de la jubilación. El trámite ya se inició y fue publicado en el último Boletín Oficial, donde se acepta la renuncia al puesto a partir del 1 de enero de 2010.
A la falta de jueces titulares, que deben multiplicarse en el estudio de las causas, se suma una preocupante carencia de personal, que afecta a varios niveles de la justicia local. Algunos con licencias médicas, otros porque han decidido recorrer otra senda laboral. Dirigentes gremiales alertaron sobre el trabajo en extremo de muchos empleados, que derivan en cuadros de estrés que obligan a pedir días de descanso. Mientras tanto se acumulan expedientes y causas, cuyas resoluciones se retardan. La carencia de personal también está afectando al tribunal de la Cámara del Crimen.
Misiva.
Ayer una altísima fuente judicial reveló que una carta firmada por dos jueces fue enviada a las autoridades con sede en Santa Rosa, para alertar de la situación de fragilidad en la cual se encuentra la Segunda Circunscripción Judicial de la provincia. Se asegura que durante el año anterior se comunicó las dificultades que atravesaban los tribunales piquenses. La carencia de reflejos para solucionar los problemas de personal parece haber profundizado los inconvenientes.
El delegado del gremio en General Pico, Hernán Ottaviano, había señalado hace 72 horas que la justicia local carecía de recursos y reclamó por la falta de nombramientos de empleados en varias categorías. Además, denunció el "estancamiento" de trabajadores, que no han podido ascender en 15 años.
Comentá la nota