Los investigadores de la causa de la mujer que fue mantenida cautiva durante tres meses en una casa de la ciudad de Coronel Suárez y sometida a abusos sexuales y físicos, por la que están acusados la periodista Estefanía Heit y su pareja Jesús Olivera, intentan determinar si los captores tenían planeado matar a la víctima y hacerlo pasar por un suicidio.

Esta teoría surge en función de lo declarado por la mujer ante la policía el mismo día que logró escapar y denunciar su calvario, que dijo que la obligaron a escribir una carta de suicidio, la cual fue encontrada dentro de la vivienda.

Tras negarse ayer a prestar declaración indagatoria ante la fiscal de la UFI 14 de Delitos Sexuales de Bahía Blanca, Claudia Lorenzo, la jueza de Garantías 1 de esa ciudad, Gilda Stemphelet, dispuso que Heit, de 29 años, y Olivera, de 28, –quien fue detenido el martes a la medianoche en la localidad de Carhué, luego de permanecer un día prófugo– queden formalmente detenidos en la causa.

La periodista quedó imputada por el delito de privación ilegal de la libertad agravada coactiva, mientras que a su pareja también se la imputa por abuso sexual con acceso carnal reiterado.

Después de la audiencia, Heit quedó alojada en una dependencia policial de Torquinst y Olivera en otra de Coronel Pringles.

La fiscal Lorenzo dijo a Télam que "hay elementos suficientes" para acusar a la pareja. Una de las principales pruebas en su contra es un video grabado con el teléfono celular de la periodista.

En esas imágenes se puede ver en primer plano el rostro golpeado de la víctima y, de fondo, se escuchan las voces de un hombre y una mujer que le dicen: "¿Por qué te golpeaste? No te golpees más.”

Los voceros judiciales también agregaron que, al hacer su declaración ante la policía, la víctima sostuvo que sus captores la obligaron a escribir una carta de suicidio, bajo amenazas de dañar a su familia.

Tanto el intendente de Coronel Suárez, Ricardo Moccero, y su secretario de Gobierno, Gustavo Di Battista, se refirieron al hallazgo de esa carta.

"Ella le indicó al capitán de la policía donde había dejado la nota, la carta, que decía que se suicidaba por distintos motivos. Yo le pregunté si había firmado la carta y me dijo: 'Sí, me obligaron y me pegaban'", precisó el intendente.

Por su parte, el secretario de Gobierno señaló que sospecha que la existencia de esa carta, sumada al delicado estado de salud en que fue encontrada la mujer, "estaría confirmando efectivamente que la pareja lo que buscaba era el fallecimiento y pérdida de la vida de la víctima"

También se informó que, según consta en el expediente, el lunes pasado, antes de ser detenida, la periodista iba acompañada por un hombre en un Chevrolet Corsa bordó por la zona de Arroyo Corto, cerca de Coronel Suárez, y se topó con dos empleados municipales que estaban barriendo la calle.

En ese momento, Heit quiso descartar una bolsa de basura y se la dio a uno de los empleados, que la inspeccionó y encontró dentro de un bulto la tarjeta de crédito de la víctima y varias fotografías.

En los próximos días se espera que la fiscal Lorenzo analice el contenido de las cuatro computadoras y unos 60 DVD que fueron secuestrados en la causa. Todo ese material estaba dentro de la casa de Heit.

Por otro lado, Lorenzo sostuvo que tiene "un cuerpo que habla, hay un montón de pericias físicas y mentales que dan veracidad a su relato".

"A la víctima se le tomó declaración en el destacamento y luego se decidió no incursionar más hasta que se recupere y hasta que los psicólogos nos digan que está en condiciones absolutas, sino me parece que estaríamos provocando otro vejamen", explicó la fiscal.

Según el informe de los forenses, la mujer sufrió maltrato físico y psicológico, lesiones por golpes de puño, palos, destornillador y martillo, y quemaduras con un encendedor.

Se determinó que los captores le daban a la víctima un vaso de agua cada dos días y que la obligaban a comer polenta mezclada con alimento y excremento de perro.

También le daban vino y psicofármacos, y la hacían inhalar pegamento para provocarle un estado de confusión.

Este siniestro hecho, que conmocionó a los habitantes de Coronel Suárez, fue descubierto el lunes, cuando la víctima se presentó en la comisaría local y denunció que acababa de escapar de una casa en la que había estado cautiva tres meses, durante los cuales había sido sometida contra su voluntad.

Esa vivienda está ubicada en Grand Bourg 1800, pertenecía a una conocida periodista de la ciudad, cara visible del Canal 4, que vivía con su pareja, un supuesto pastor de una presunta secta religiosa.

La víctima, oriunda de Río Colorado, había llegado a Coronel Suárez tras conocer a Olivera, quien le prometió formar parte de la fundación de una nueva comunidad religiosa y ayudarla a continuar con sus estudios.

Una de las hipótesis es que Heit y Olivera secuestraron a la mujer para apoderarse de los 100 mil pesos que había recibido por la venta de un terreno en su ciudad natal y por los giros postales que le enviaban sus familiares y amigos. «

la bronca de la familia de la víctima

La madre de la mujer secuestrada y torturada pidió ayer que "la justicia actúe rápidamente" en el caso y aseguró que ella venía previendo que algo malo podía pasarle a su hija, ya que conocía al hombre –Jesús Olivera– a quien definió como un "manipulador".

"Esto hace mucho tiempo que yo lo venía diciendo pero la justicia tiene un modo muy lento de actuar y muchas veces llega tarde. Puedo dar gracias a Dios que mi hija está con vida", sostuvo en declaraciones periodísticas.

"Yo lo conocí y yo me salí de esto", sostuvo en referencia a Olivera y su presunto grupo religioso. "Yo sospeché porque este tipo manipula a la gente", aclaró sobre el detenido, quien se presentaba como "pastor". Al ser consultada si Olivera y su esposa habían estafado con dinero a su hija, respondió: "Eso lo estamos viendo ahora."

"Ella es una de las que estuvo con mi hija, no sé si es víctima o no", indicó la mujer cuando le preguntaron si la periodista Estefanía Heit podía también estar sometida por su marido.

En tanto, el hermano de la víctima dijo que su mamá se alejó de Olivera "a los diez meses, pero mi hermana no me hizo caso”. Y agregó: “Si me lo encuentro lo mato, aunque vaya a la cárcel de por vida.”

"estefanía cambió su forma de ser"

El padrastro de Estefanía Heit, la periodista de televisión detenida por el secuestro y violación de una mujer en su casa de Coronel Suárez, aseguró ayer que su hijastra "es inocente" y que fue engañada por su pareja, el también detenido Jesús Olivera.

"Era una chica buenísima, pero se enfrentó a mí cuando le dije que ese muchacho no era para ella", relató hoy Luis Graff, pareja de Olga Schulmaster, la madre de Estefanía.

El hombre dijo que a Olivera lo vio sólo "dos veces" en su casa y en ambas oportunidades le dijo a su mujer que "ese muchacho se tiene que ir por donde vino".

"Fue él el que se mandó toda esta macana. Estefanía no tiene nada que ver porque le lavó la cabeza", agregó a la prensa en la puerta de la fiscalía ubicada en Estomba al 400, de Bahía Blanca, donde Heit se negó a declarar ante la fiscal de Delitos Complejos, Claudia Lorenzo.

"Olivera es un sinvergüenza y él vivía de ella, pero Estefanía se puso en contra mío y de la madre. Entonces no pudimos hacer nada."

Olga, la mamá de la periodista, aclaró que desde hace tres años que no tiene contacto con su hija y responsabilizó a Olivera de haberla alejado de sus seres queridos. "La absorbió tanto que nadie entraba ni salía de la casa, le decía que tenía el Diablo, y mi hija había dejado a sus amigas y a su entorno", expresó la mujer. "Estefanía cambió su forma de ser, tuvimos una vez un altercado y ella me denunció, por lo que cuando hablamos con la policía les dijimos que lo investigarán a él (Olivera)", agregó.

Al ser consultada sobre si su hija y Olivera pertenecían a alguna secta, Schulmaster dijo: "Cualquiera pone una iglesia y se hace pastor, acá."