Sergio Uñac y Lucía Corpacci, que sonaban para encabezar el partido, brindaron su respaldo a la expresidenta. Se sumaron el PJ bonaerense y el de Santa Fe. Quintela, por ahora, no se baja.
El operativo clamor iniciado el jueves para pedir que Cristina Fernández de Kirchner presida el Partido Justicialista (PJ) nacional no para de crecer. Luego de una serie de reuniones con intendentes, dirigentes sindicales y legisladores, la expresidenta aseguró que está dispuesta a asumir el cargo y generó un cisma al interior del peronismo. Mientras sumó la adhesión de figuras como el senador sanjuanino Sergio Uñac y la senadora y presidenta del partido en Catamarca, Lucía Corpacci; el gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, afirmó que continuará con su postulación. En la provincia de Buenos Aires, el PJ local también dio una contundente muestra de apoyo.
“Líder y abanderada del peronismo”. Así describió a CFK el PJ de Catamarca, conducido por la exgobernadora Corpacci. “Como mujer que ha entregado su vida entera sin claudicar jamás, por la grandeza de la Patria y el bienestar de los argentinos, es la conductora natural de un movimiento que hoy más que nunca tiene la responsabilidad de devolverle la felicidad al pueblo”, sostiene el documento. De esta forma, la actual vicepresidenta del partido a nivel nacional, que sonaba para presidirlo, brindó un fuerte respaldo a Cristina Fernández. Se sumó así al mensaje que dejó el exgobernador Uñac, quien manifestó que es "tiempo de unidad" y de "devolver la esperanza a los argentinos". "Estoy convencido que, desde el PJ Nacional, Cristina Kirchner puede liderar este proceso”, publicó en redes sociales.
La exmandataria también recibió el apoyo de numerosos dirigentes del PJ Bonaerense, que se reunieron con Máximo Kirchner en Monte Hermoso. Más de 50 intendentes, legisladores y consejeros del espacio participaron del encuentro en el que surgió el apoyo mayoritario a su candidatura. Francisco “Paco” Durañona, exintendente de San Antonio de Areco, manifestó su postura en una publicación. ”El valor político, cultural, social e histórico de CFK para la Argentina y el Peronismo es inocultable”, sostuvo el exjefe comunal. También desde la provincia de Santa Fe llegó el apoyo del PJ provincial. “Vamos a aportar todos los avales necesarios para que Cristina Kirchner conduzca nuestro movimiento y generar todas las transformaciones necesarias para la felicidad de nuestro pueblo”, sostuvo su secretario general, Daniel Ríos.
Con el mismo énfasis, la Regional La Matanza de las 62 Organizaciones Gremiales Peronistas publicó una carta en la cual sostienen que “el Justicialismo necesita de un liderazgo que bregue por los intereses del Pueblo” y que “en la conducción de la Compañera Cristina, el Peronismo volverá a ser la opción de las mayorías, para recuperar la felicidad del pueblo y la grandeza de la Nación”. "Ante esta crisis que se profundiza, la caída de los salarios, la desocupación, el empobrecimiento, la caída productiva, el peronismo tiene una vez más la obligación de conducir los destinos de la Patria", añade el comunicado, que lleva la firma de los referentes de los gremios locales como la UOM, la UOCRA, Canillitas y Camioneros, entre otros.
El operativo clamor para impulsar a la expresidenta tomó volumen con el mensaje en redes sociales del senador Eduardo “Wado” De Pedro. Minutos más tarde, se pronunciaron diversos dirigentes de peso como los senadores Mariano Recalde y Juliana Di Tullio;la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza; el exgobernador de San Juan José Luis Gioja; y el titular del gremio de Encargados de Edificios, Víctor Santa María.
Sin embargo, el gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, mantiene su candidatura y no se corre de la competencia. En un encuentro en la provincia de Neuquén, sostuvo que “en esta oportunidad se necesita otra mirada, otro mensaje, otro vocabulario. Se necesita, me parece a mí, otra tonada inclusive, que pueda tener una actitud diferente a lo que ya conocemos”.
Si bien Quintela aclaró que con Cristina no tiene “ningún problema”, criticó a La Cámpora y afirmó: “Esto de armar listas a espaldas y dar por sentado que está la aceptación general del conjunto del pueblo me molesta”.
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