Juan Carlos Lancia, delegado gremial de los empleados del Concejo Deliberante de Valle Viejo, explicó que la propuesta de los concejales no cumplió las expectativas de los trabajadores y las negociaciones llegaron a un punto muerto. “Era ridículo cambiar una deuda por nada”, manifestó. En declaraciones a LA UNION, el delegado gremial denunció que hay una orden política del intendente de Valle Viejo, Gustavo Jalile, de no reconocer a los trabajadores el sueldo anual complementario, ya que esto significaría al municipio una erogación de “millones de pesos”. El lunes, Lancia comenzará una huelga de hambre enfrente del Concejo para continuar con el plan de lucha.

Los trabajadores del Concejo reclaman el aguinaldo de 2009 y la primera cuota de 2010, además del retroactivo del aumento de 141 pesos mínimos otorgado el año pasado. Sin embargo, según Lancia, “evidentemente acá hay una orden política, del aguinaldo no se habla, el aguinaldo no se puede reconocer porque esto le significaría al Ejecutivo varios millones de pesos que debería pagar a todos los empleados municipales”.

“Nos dijeron que nos olvidemos de las deudas de los aguinaldos, propusieron que renunciáramos a todos los aguinaldos de 2009 y 2010, pero que a partir del primero de enero de 2011 íbamos a comenzar a cobrarlo, aunque no figuraría como sueldo anual complementario. Y que de recomposición salarial solamente nos reconocen 60 pesos y el 15 por ciento de los meses de marzo y abril”, por ello “se hizo una asamblea y se decidió seguir con el plan de lucha”, explicó Lancia.

No obstante, de acuerdo con lo explicado por el delegado gremial, por las presiones y amenazas que sufrieron los trabajadores él propuso continuar el reclamo con una huelga de hambre. “Se hablaba de que iban van a echar a los contratados, así que al paro lo continúo yo. Iniciaré una huelga de hambre el lunes a la que se irán sumando paulatinamente algunos, ya sea en forma permanente como yo, algo que no quiero, sino que lo hagan por días o por períodos. Mantenemos la lucha, impedimos que ellos tomen acciones con los trabajadores y hacemos que ésta llegue a oídos de las autoridades superiores”, anunció.

La semana que viene, el paro sigue pero con otra modalidad. Los trabajadores volverán al Concejo Deliberante y Lancia realizará su protesta frente a éste. “Con los empleados adentro, a ver si los concejales se animan a trabajar, a ver si se animan a dar la cara y a dar órdenes. Más allá de que haya respeto y que por supuesto los trabajadores no ofrecerán resistencia, lógicamente el ambiente no va a ser el mejor”, adelantó.

Por último, indicó que esto es un problema “político generado por el Ejecutivo, no por falta de dinero, sino porque tiene la decisión de pagarle cada vez menos a los trabajadores para poder seguir tomando gente. Nos pagan menos, nos reconocen menos aumentos, pero ellos siguen políticamente nombrando personal y gastando el dinero público en cuestiones políticas”.