La cooperativa de reciclaje Cotranvi insistió con marchas y movilizaciones durante la semana que pasó, en la inmediata habilitación de la planta Girsu, para poder hacer su trabajo en las condiciones adecuadas.

Sus integrantes sostienen el atraso de los compromisos asumidos hace unos pocos meses, y la preocupación que les genera la reciente inauguración de una empresa en el Parque Industrial que se encargará de la conservación de expedientes y su digitalización. Insistieron desde la cooperativa no criticar la apertura de una nueva empresa, sino el riesgo de quedarse sin la materia prima para el reciclaje, que en una enorme proporción, son los papeles que desechan las oficinas del Estado.

El reclamo es además por un lugar adecuado para el trabajo, que hoy no lo tienen, tras el cierre de denominado “prebasural” en agosto del año pasado.

Al respecto, la planta de reciclaje Girsu, ubicada a dos kilómetros de la última edificación del barrio 30 de Marzo, es parte de la solución a sus problemas.

Esa planta fue construida con fondos del Estado nacional, gestionados por el ex intendente José Luis Foulkes. Es un componente más de un sistema que incluye al relleno sanitario y una planta de transferencia.

Es por ello que tras una nutrida manifestación, fueron recibidos por funcionarios del gobierno municipal. 

Si bien no trascendió oficialmente contenidos del encuentro, se supo que fue en buenos términos.

“Nosotros intentamos mejorar nuestras condiciones de trabajo y hacer que el reciclado crezca en nuestra ciudad, ya que es fundamental para el cuidado del ambiente”, dijeron desde la cooperativa. 

Agregaron: “Durante la reunión se pudo hablar de las dificultades que se han presentado durante estos meses y se renovaron los compromisos para avanzar sobre los puntos tratados”.