Fueron cubiertas con grandes trozos de hormigón. Los diques sobre la cuenca del río Quinto evitaron daños mayores.
Después de la crecida mayor del lunes pasado a la madrugada, parte de la contención del río Quinto cedió ante la fuerza del agua. Con máquinas viales, camiones y escombros de hormigón, el Municipio logró rellenar las dos zonas afectadas para evitar el avance del río en una zona cercana al Parque Costanera y en la costanera Sur. Los diques ubicados a lo largo de la cuenca del río evitaron que la fuerte crecida inundara parte de la ciudad.
El sector más afectado comprendió unos 50 metros de la contención a la altura del parque (zona de Lavalle y Costanera) que sufrió en la madrugada del lunes y ya está asegurado. “El curso del río se desvió y empezó a pegar sobre la trinchera donde está la bicisenda, ese golpeteo produjo un desbarrancamiento que también daño la ciclovía. Llevamos maquinaria, dos palas cargadoras y camiones, con los que tiramos restos de hormigón para taparlo, colaboraron dos empresas locales con esa tarea para asegurar el sector”, indicó Pablo Pedernera, responsable del área de Planificación y Programación en la Secretaría de Servicios Públicos.
El funcionario explicó que la contención original tiene una carpeta de membrana con adoquines y tierra, el agua comenzó a socavar la base y logró desmoronarla. “Esto ya fue informado a la Provincia para que luego evalúen la situación y piensen una solución definitiva”, dijo Pedernera.
Mediante las rondas de control, que aún se mantienen, el martes por la tarde las autoridades descubrieron otro sector afectado. En Almafuerte y Costanera, zona antes conocida como Bajo Vea y hoy llamada Costanera Sur, el agua también devoró parte de la tierra pero no afectó la bicisenda.
“Ahí existía el peligro, el curso también se desvió hacia la trinchera pero no provocó daños mayores. Con maquinaria de la Municipalidad, hicimos lo mismo sólo que en este sector los trozos de hormigón los tiramos al curso del río para tratar de desviarlo o que el agua golpee en la piedra y no con el muro de contención”, señaló el funcionario.
Para las dos tareas de rellenado y fortalecimiento de la orilla del río fueron necesarios más de 50 viajes con cuatro camiones de gran porte (tienen bateas cuya capacidad supera en cuatro veces la de un camión normal), y diez camiones volcadores convencionales.
El rol clave de los diques
Desde San Luis Agua, aseguraron que en los últimos días la crecida fue muy importante, pero la población local no la sufrió por la función primordial que cumplieron los diques sobre la cuenca del río.
“El agua de la cuenca se regula a partir del dique Esteban Agüero, y luego La Florida, Saladillo, Paso de las Carretas, hasta que llega al Vulpiani. Todos trabajaron muy bien, y si uno piensa que todos los que están sobre el río Quinto están llenos y por sobre el vertedero, eso demuestra la magnitud de la crecida, que fue realmente muy grande, pero el funcionamiento de las presas evitó que existieran inundaciones en Villa Mercedes”, explicó Hugo Guzmán Durán, presidente de San Luis Agua.
El ingeniero indicó que durante enero y febrero en varias oportunidades hubo crecidas, pero el sistema de diques permitió contenerlas y la gente no llegó a percibirlas.
“Entiendo que con esta cantidad de diques no deberían existir problemas grandes en Villa Mercedes, soy optimista en esta cuenca específica, la ciudad no debería sufrir inconvenientes”, aseguró Guzmán Durán.
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