El incipiente rebote de la industria corre el riesgo de encontrar límites en la continuidad, producto del riesgo de desabastecimiento de gas.
Por: Juan Marcos Pollio.
A pesar de que la actividad industrial dio indicios de haber tocado piso durante abril, con una mejora de 0,7% según Orlando Ferreres & Asociados, la decisión del Gobierno de suspender los servicios de gas a las industrias para evitar el desabastecimiento en los hogares trajo incertidumbre en el sector fabril. La semana pasada, las transportistas y distribuidoras procedieron con el corte de gas a las fábricas que cuentan con servicios interrumpibles, mientras que durante los últimos días comenzaron con el recorte de los servicios de tipo ventana en las fábricas con servicio en parte interrumpible y en parte firme.
Según Orlando Ferreres & Asociados, el nivel de la actividad industrial fue levemente superior en abril, con una suba mensual de 0,7% desestacionalizada. "De todas maneras, es aún muy pronto para sugerir que hemos dejado atrás el piso de producción industrial, y algún rebote era esperable luego de un mes particularmente malo", aclararon desde la consultora. El dato de la suba intermensual fue en línea con la expectativa de la UIA, que marcó que abril pudo haber sido mejor que marzo.
De todas maneras, este incipiente rebote del entramado productivo corre el riesgo de encontrar límites en la continuidad, producto del riesgo de desabastecimiento de gas. Enargas declaró la preemergencia del sector e instruyó a todas las transportistas y distribuidoras a proceder con el corte de los servicios interrumpibles de gas, producto del riesgo de desabastecimiento causado por las bajas temperaturas.
El director de consultora Marca Pyme, Pablo Bercovich, afirmó que los cortes de gas "ya están impactando en la actividad del sector pyme". De manera similar, el titular de Industriales Pymes Argentinas (IPA), Daniel Rosato, aseguró que esta decisión del gobierno "va a afectar de manera sustancial a muchas empresas" y se quejó por la falta de información que brindó el Ejecutivo sobre el tema. "No sabemos si van a ser programados o cómo van a ser. No hay una bajada de línea o de información más precisa de cómo se va a ir dando".
Rosato consideró que si los cortes se realizan como en otras ocasiones del pasado reciente, se harán durante "los horarios pico, es decir, de mayor frío o de más consumo". Y explicó: "Lógicamente, eso afectaba muchísimo, porque se cortaban los procesos continuos. Lo que más afecta ese corte de gas es en las líneas de producción que uno, por lo general, trata de no cortarlas, porque la pérdida es mucho mayor. Para poner en marcha esa línea uno está seis, ocho horas, hasta medio día".
Fuentes del sector distribuidor de gas explicaron que hay fábricas con servicios interrumpibles que se encuentran hace una semana con el servicio suspendido. Además, durante los últimos días se avanzó con el recorte de los servicios de tipo ventana, un tipo de contrato que permite cortar solamente por un tiempo acordado y con aviso previo. "Hay industrias que acuerdan que el 80% del suministro de gas va a ser interrumpibles y el 20% firme", ejemplificaron.
La Secretaría de Energía argumentó que el racionamiento del gas es consecuencia de "la presencia anticipada de bajas temperaturas, que han sido más bajas que las pronosticadas (y más propias del invierno)", a las que se le sumó "un consumo excepcionalmente alto de la demanda prioritaria (usuarios residenciales) de gas natural".
También aludieron a la reducción del suministro de gas proveniente de Bolivia y a "la vulnerabilidad del sistema gasífero derivado de su infraestructura insuficiente desde hace décadas por falta de inversión (lo que genera cuellos de botella en el fluido del gas)".
A pesar de que desde la cartera energética brindaron precisiones sobre hasta cuando durará el riesgo de desabastecimiento, entre las distribuidoras esperan que se mantenga la preemergencia hasta los primeros días de junio.
Comentá la nota